La Comunidad de Madrid ha reaccionado ante los rebrotes de COVID-19 en España.
La presidenta, Isabel Díaz Ayuso, ha anunciado que será obligatorio a partir del jueves 30 de julio el uso de la mascarilla, así como otro conjunto de medidas agrupadas en un plan de contingencia llamado «Madrid no se para».
Según informó Díaz Ayuso, ya los madrileños están acostumbrados a llevar las mascarillas de forma habitual, sin embargo, ahora, ante la llegada de turistas, será obligatorio para los mayores de 6 años ponerse el tapabocas en terrazas y bares mientras no se esté consumiendo.
A diferencia de la medida ya implantada por el Gobierno de Pedro Sánchez, no se tomará en cuenta la distancia entre personas ni las aglomeraciones, mascarilla sí o sí.
Otra de las regulaciones contempladas en el plan es que se han prohibido las reuniones de más de diez personas, en espacios públicos y privados, además de esto se ha decidido mantener abierto al ocio nocturno, pero solo hasta las 1.30 de la madrugada.
Rastreo del coronavirus
La Comunidad de Madrid ha decidido también poner en práctica un programa de rastreo de los pacientes que han tenido COVID-19, en este sentido ha anunciado una cartilla vírica, como la de las vacunas, pero en este caso para tener un registro de las personas con anticuerpos.
El objetivo es «evitar confinamientos», y que estas personas puedan acceder a gimnasios, museos, cines o a cualquier recinto cerrado y puedan «seguir su vida normal» al tiempo que extreman las precauciones hacia los más vulnerables.
Hospitales en Ifema
Por último, la Comunidad de Madrid va a activar el Hospital de Emergencias Isabel Cendal de forma temporal en dos pabellones de Ifema, hasta que el hospital de pandemias esté a pleno rendimiento para empezar a derivar pacientes y evitar que el COVID-19 vuelva a todos los hospitales de la región.
«Vamos a establecer una estrategia con los gerentes y con los equipos médicos de manera que el COVID no vuelva a todos los hospitales y para que todo el personal sanitario no vuelva a pasar por la misma pesadilla«, ha trasladado Ayuso. Así, se derivaran a estos pacientes para que los demás centros sanitarios «puedan recobrar la normalidad».
