Gabriel Rufián está intentando olvidar la humillación que vivió ante Mariano Rajoy.
El expresidente del Gobierno se ha sentado este lunes 13 de diciembre de 2021 como compareciente en la comisión de investigación del Congreso sobre la Operación Kitchen. A pesar de que el diputado de ERC intentó acorralar al expresidente del Gobierno, cada una de sus preguntas fueron respondidas con un ‘zasca’ que no solo dejaron al independentista en ridículo, sino que incluso le marcaron como mentiroso.
En un intento desesperado por pasar página, Rufián jugó su comodín: el atacar a la Casa Real.
Aferrándose a los rumores del posible regreso de Juan Carlos I, el separatista aprovechó la sala de prensa del Congreso de los Diputados (desde la que censura a los medios más críticos con el independentismo catalán) para permitirse el lujo de poner condiciones acerca del regreso del monarca.
El portavoz de ERC admitió que no ve mal que el Emérito regrese a España siempre y cuando cumpla con la «propuesta» que han lanzado desde su partido: «Si quiere volver, podría vivir en un piso de 60 metros cuadrados en un barrio obrero y cobrar la pensión mínima no contributiva», ha dicho, para despreciar, de esta manera, la condición institucional de Juan Carlos I.
🔴 @gabrielrufian: "Tenemos una propuesta para el rey emérito. Si quiere volver a España, podría vivir en un piso de 60m2, en un barrio obrero y cobrar la pensión mínima no contributiva" ▶ https://t.co/5gir6ftTei pic.twitter.com/wgCHjxjIXB
— AlRojoVivo (@DebatAlRojoVivo) December 14, 2021
«Sería lo mejor para que (el Rey Emérito) conociera la otra realidad que vive la inmensa mayoría de la población», ha apuntado Rufián, sumándose así a las críticas proferidas por los socios del Gobierno de Sánchez, Unidas Podemos, que ya aseguraron este lunes 13 de diciembre que la Monarquía es una estructura que «implica la posibilidad de cometer corrupción».
También y sobre la posibilidad de que Juan Carlos I regrese a España, el portavoz estatal de Podemos, Pablo Fernández, lanzó que si eso se produce debería ser para «rendir cuentas» ante la Justicia y la ciudadanía por unos «hechos gravísimos».