Caretas fuera.
La socialista Francina Armengol deja clara su posición respecto al idioma castellano en los centros educativos de Baleares.
Nada de reservar, como mínimo, un 25% de las horas docentes a la lengua común de todos los españoles.
A pesar de lo que la Justicia ha mandatado, para el PSOE en esta autonomía lo que tiene que primar en las aulas es el uso y el aprendizaje de la lengua catalana.
Tanto es así que en el proyecto de ley educativa que se ha presentado al resto de grupos políticos en el Parlamento regional, se establece que las horas en catalán deben ser, por lo menos, el 50%, pero sin poner un tope máximo.
El temor a que los socialistas arrinconen en la medida de lo que puedan el castellano lo constata el hecho de que se rechazase de plano una enmienda de Ciudadanos para pedir que se respete ese porcentaje del 25% en relación a las horas de enseñanza en castellano.
Es más, el tripartito conformado por PSOE, Unidas Podemos y los nacionalistas de Més, una especie de ERC balear, señala que el uso del castellano quedará a criterio de cada centro escolar.
Y también da la posibilidad a colegios e institutos de incrementar a caprichos las horas lectivas que se impartan en catalán.
Es decir, que en una misma localidad habrá alumnos que, perfectamente, no tengan una sola hora del idioma común que se habla en toda España.
Por tanto, a pesar de que el Tribunal Supremo ha sido tajante en este aspecto, Baleares piensa seguir el mismo camino que la Generalitat de Cataluña.
Y ese sendero no es otro que incumplir las sentencias judiciales y animar a los directores y a los docentes a rebelarse contra la impartición de clases en castellano y apostar por la inmersión lingüística.
De hecho, esa exigencia parte tanto de los podemitas como de los nacionalistas, pero el PSOE balear abraza la causa con fervor.
Y no solo es en la educación donde el tripartito mete la zarpa.
Que se lo digan a los trabajadores de la sanidad en Baleares, que han visto como el Ejecutivo de Armengol les ha puesto en el punto de mira si no atienden a los pacientes en catalán.