Los presidentes socialistas Emiliano García-Page y Pedro Sánchez están siendo los protagonistas de la furgoneta que recorre toda Castilla-La Mancha informando de la responsabilidad que ambos han tenido en la nefasta Ley del Sí es Sí y en los vergonzosos beneficios que están obteniendo cientos de agresores sexuales.
“Furgovioladores” es el nombre con el que se conoce a esta furgoneta serigrafiada con la foto de Pedro Sánchez y Emiliano García-Page abrazos, bajo el rotulo de “Los violadores a la calle y ellos lo sabían. Culpables sí o sí».
La preocupación en las filas socialistas es máxima por cuanto el mensaje que traslada es rotundo y, no menos importante, inapelable al hacerles responsables de los efectos de una ley, básicamente porque el propio Emiliano García-Page se encargó de hacerlo público de manera notoria.
El pasado 23 de noviembre, PD ya publicó que Page confirmaba que sus diputados votaron voluntariamente reducir penas a violadores y pederastas. Sin duda, la sobreactuación en política, como en la propia vida, tiene un riesgo elevado de volverse en contra.
Esto es lo que ha sucedido con el presidente socialista de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page. Es conocido su afán de intentar desmarcarse de Pedro Sánchez, en un auténtico insulto a la inteligencia, pues las nefastas y escandalosas medidas que para España y Castilla-La Mancha han aprobado el gobierno del inquilino de La Moncloa, no serían realidad si no hubieran tenido el voto favorable de sus 9 diputados nacionales del PSOE. Todos ellos liderados por el secretario de organización de los socialistas manchegos y mano derecha de Page, Sergio Gutiérrez.
Furgovioladores
Page, para intentar desmarcarse de la decisión, filtró a El Confidencial el informe que remitió a la Ministra de Igualdad, Irene Montero, advirtiendo que estos depredadores sexuales se verían beneficiados sin darse cuenta del error mayúsculo que supone advertirlo públicamente cuando posteriormente has dado orden de que se apruebe. Él sólo se puso la soga de su responsabilidad.
Lejos de arrepentirse, disculparse y tomar medidas para corregir su gravísimo error, en fechas posteriores Emiliano García-Page se dedicó a frivolizar sobre el asunto. Fue el pasado 8 de marzo cuando en el mismo momento en el que se conocía que más de 800 agresores sexuales se habían visto beneficiados por su Ley del Sí es Sí, muchos de los cuales han sido directamente excarcelados, se permite el capricho de reírse de las mujeres que han sido violadas, faltando el respeto a todas las mujeres víctimas de violencia de género.
Le debió parecer insuficiente, pues pocos días después, el 16 de marzo, llegaba a comparar la violación de una mujer con el trasvase de agua en el penúltimo insulto del socialista castellano mánchego por el que -en esta ocasión tampoco- todavía no ha pedido disculpas,
Con todos estos antecedentes, Page es perfectamente conocedor de que no hay argumento posible que pueda desacreditar el contundente mensaje de la “Furgovioladores”. Cada kilómetro que recorre es un recordatorio ciudadano de que en Castilla-La Mancha preside el gobierno alguien que nada puede aportar en la defensa de las mujeres de la región.
