No ha sido el hecho concreto pero sí la ‘mala baba’ con la que lo ha contado el suplemento del diario El Mundo, LOC, en una información de hace 10 días y que titulaba bastante malintencionadamente “Juan Carlos I vuelve a las andadas en Abu Dhabi”.
Ocurría hace unos días, pero es –según ha podido saber Periodista Digital– ahora cuando ha provocado un terremoto en la Casa Real porque es cuando el Emérito, según aseguran a PD fuentes cercanas a Palacio, ha recibido una reprimenda de La Zarzuela.
La información comenzaba asegurando que “ya está de vuelta de todo y que al Rey Juan Carlos no le importa mucho el qué dirán se ha confirmado de nuevo con su desplazamiento a los Emiratos Árabes Unidos para disfrutar del Gran Premio de Abu Dhabi”.
Y recordaba a los lectores que “se cumple justo un año de la llamada foto de la vergüenza, la que se produjo en este mismo lugar durante el encuentro del Emérito con el príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohamed bin Salman. Ambos coincidieron área de autoridades para ver en directo la prueba automovilística, una de las pasiones que comparten”.
“La polémica vino dada porque Don Juan Carlos se convertía así en el primer dirigente occidental que saludaba a Bin Salman en plena condena de la comunidad internacional por la supuesta implicación del heredero saudí en el asesinato del periodista Jamal Khashoggi, un crimen que hoy en día sigue sin esclarecerse y continúa impune”, destaca.
Contaba además que “Don Juan Carlos y el polémico Bin Salman han compartido la zona vip del circuito donde han disfrutado del Gran Premio de Abu Dhabi. El heredero saudí ha acudido a las instalaciones junto al príncipe Khalid bin Salman, viceministro de defensa de Arabia Saudí, y el príncipe Abdulaziz bin Salman, ministro de energía. Allí han sido saludados por el príncipe heredero de Abu Dabi, el jeque Mohammed bin Zayed y por el gobernante de Dubai, el jeque Mohammed bin Rashid”.
Explicaba el texto con detalle que “junto a todos ellos ha ocupado un lugar de honor Don Juan Carlos, quien desde hace muchas décadas mantiene unas relaciones muy estrechas con los dirigentes del Golfo”.
Y volvía a meter el dedo en la llaga para terminar de rematar el artículo: “el Emérito español ha vuelto a demostrar que no le importa ser objeto de polémicas y estar en el centro del huracán. Máxime después de que el pasado mes de mayo decidiera abandonar todas sus responsabilidades públicas».