El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, ha anunciado que el Ayuntamiento de la capital propondrá en su próxima sesión plenaria dedicar a Marcelino Camacho el nombre de una calle, de una plaza o de un espacio público de la capital para que su figura quede «siempre vinculada» con la capital y sirva de «modelo» para las nuevas generaciones.
«Como agradecimiento y para que sea recordado como un modelo a seguir», ha añadido el alcalde, que visitó la capilla ardiente del líder sindical, donde destacó su «integridad, honestidad y muchísima generosidad».
Según Gallardón, fue un hombre «generoso» que «sacrificó lo más importante que un hombre puede sacrificar en su vida, su libertad, para luchar por la nuestra, superando cualquier tipo de dolor del pasado para convertirlo en propuestas positivas para el presente y para el futuro».
«Es el ejemplo que tenemos que tener de una generación que hizo la transición y que supo mirar hacia adelante», ha subrayado, añadiendo que Camacho «intentó superar las divisiones, comprender a quien pensaba de modo diferente y buscar un modo de defender las propias convicciones sin imponerlas por la fuerza a los demás».
«Dignidad, integridad, constancia, valentía, honestidad y muchísima generosidad. Creo que ésas son las palabras que mejor pueden definir el sentimiento que muchísimos madrileños y muchos españoles tienen por Marcelino Camacho», ha apostillado.
