Bono se queda solo en su propuesta de recucir el Pleno del Congreso a dos días

El presidente del Congreso, José Bono, se ha quedado solo en su propuesta para reducir las sesiones plenarias en la Cámara Baja a dos días a la semana (martes y miércoles), frente a los tres que siempre han sido necesarios (martes, miércoles y jueves).

Bono lanzó su idea esta mañana al finalizar el Pleno, cuando apenas quedaban unas decenas de diputados. Dijo que «diversos portavoces» le habían planteado «la conveniencia de ensayar la posibilidad de que las sesiones plenarias con carácter ordinario pudieran celebrarse en dos días, en vez de en tres».

Esto supondría que los diputados sólo tendría que estar en el Congreso los martes y los miércoles, ya que las mañanas de los jueves -cuando se debaten las iniciativas legislativas del Gobierno-quedarían vacías al pasarse al miércoles.

Bono puso como ejemplo lo ocurrido este mismo miércoles para justificar que se puede hacer, ya que «en una sesión de control más que completa, con cuatro interpelaciones, vamos a levantar la sesión antes de las 13 horas».

Por eso, planteó que daría tiempo a que, al terminar las sesiones de control al Gobierno los miércoles, el Pleno del Congreso continuase debatiendo los puntos del orden del día que corresponden al jueves.

Ninguno de los pocos diputados que permanecían en el escaño al final del Pleno de hoy pusieron inconveniente, así que Bono levantó la sesión hasta la semana que viene dando las gracias «por esa unanimidad en el asentimiento».

RECHAZO CONTUNDENTE

Las reacciones en contra no tardaron en llegar. Tanto el PP como el PSOE han negado que sus portavoces, Soraya Sáenz de Santamaría y José Antonio Alonso, respectivamente, hayan propuesto algo similar a Bono y han anunciado que se opondrán.

Por su parte, el diputado de CiU Pere Macías manifestó que no ve necesidad de modificar la organización de los Plenos y criticó que �en estos últimos días no se nos ha planteado oficialmente este cambio�, sino que Bono simplemente �dejó encima de la mesa esta posibilidad, sin que hubiera ningún pronunciamiento�.

El PNV tacha de «unilateral» la propuesta y quiere que Bono someta a la Junta de Portavoces de la Cámara Baja su propuesta para que las sesiones plenarias parlamentarias se reduzcan de tres a únicamente dos días, martes y miércoles, lo que supondría suprimir la actividad habitual de los jueves.

IU e ICV no se opone a modificar la organización de los Plenos pero es contrario a que se haga �extensivo� al curso parlamentario tras las vacaciones de verano.

El BNG se muestra escéptico porque cree que se puede hacer una �lectura equívoca de que se quiere trabajar poco� en el Congreso de los Diputados. Por su parte, ERC considera que el plan de José Bono no ayuda a la imagen de los diputados.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Lo más leído