El portavoz de Alternatiba y representante de Bildu, Oskar Matute, considera que hay «una cruzada» contra la coalición soberanista, que comenzó «el mismo 22 mayo», cuando se celebraron las pasadas elecciones municipales y forales, y ha recordado «el Vía Crucis» por el que se le hizo pasar, en referencia a los tribunales y a la posibilidad de que pudiera ser ilegalizada. A su juicio, existe «temor» porque «la ola del tsunami de Bildu no ha terminado».
En declaraciones a Europa Press, Matute ha subrayado que «los pasos de abandono definitivo de la violencia serán palpables», pero la paz definitiva «se parecerá más a una carrera a medio o largo plazo» que a una «corta».
Matute ha manifestado que «no debería sorprender a nadie» que Garitano haya «saludado a los concentrados de Etxerat» y les haya trasladado las reflexiones de Bildu de «apuesta por un proceso de paz y soluciones democráticas, que se vinculan directamente con el Acuerdo de Gernika y habla del derecho de los presos y de la exigencia al Estado español del cumplimiento de una legalidad penitenciaria más humana y justa».
«Sólo indigna a aquellos que están esperando cualquier movimiento de Bildu para encontrar algún argumento, por peregrino que sea, que les permita continuar en esta cruzada contra Bildu, una cruzada que se inició el mismo 22 de Mayo y que, incluso, venía de antes. No hay más que ver todo el ‘Vía Crucis’ que nos hicieron pasar por Tribunales», ha subrayado.
A su juicio, esto «demuestra el miedo profundo que les supone el ascenso y la potencia de Bildu», que es «el cuestionamiento de su poder, bastante cuestionable en términos democráticos». «Yo creo que Martín Garitano no ha hecho nada que se salga del guión de lo que debe hacer un cargo electo de Bildu», ha apuntado, para precisar que sus reclamaciones a los poderes públicos «coinciden con lo que la mayoría de la sociedad vasca piensa».
Oskar Matute ha destacado que la coalición soberanista no se está decantando por «una parte» y ha recordado las declaraciones del alcalde de Rentería, Julen Mendoza, al asegurar que compartía «al cien por cien» el contenido la moción presentada por PNV, PSE y EB, también apoyada por el PP, en la que el Consistorio se comprometía con el rechazo de la violencia como instrumento de acción política o para lograr objetivos políticos», pese a que no la respaldara.
Además, ha destacado que la presidenta de las Juntas Generales de Guipúzcoa, Lohitzune Txarola, «ha tenido una posición muy clara en torno al respeto que hay que tener a todas las víctimas de la violencia, incluidas las de ETA, reconociendo que ha existido la violencia» de la banda armada. «Es decir, rechazamos de pleno cualquier violencia, incluida la de ETA», ha aseverado.
También se ha referido al hecho de el Ayuntamiento de Tolosa, gobernado por Bildu, «haya decidido sufragar los costes de un monolito» dedicado al ex gobernador civil de Guipúzcoa Juan Mari Jáuregui, «aún cuando habría que conocer al detalle quiénes son los causantes de los destrozos e investigarlo».
«Ha habido posiciones muy claras de Bildu que son denostadas o silenciadas por aquellos que tienen como única fijación intentar trasladar a la ciudadanía de este país una imagen distorsionada de Bildu, una imagen que corresponde al pasado, a un pasado de confrontación, de bloques estanco, y que no obedece a la realidad», ha destacado.
En este contexto, ha considerado que existe un «temor» a la «ola o el tsunami que levantó a Bildu» y que «no ha terminado, ni mucho menos, sino que tiene una progresión ascendente».
Además, ha manifestado que «el proceso de paz y de soluciones democráticas tiene que tener una etapa» de generación de un escenario de reconciliación «en todos los planos», también el del «reconocimiento, acompañamiento y solidaridad activa con las víctimas».
No obstante, ha apuntado que «no se puede forzar la máquina» y que lo que hay que conseguir es que «la violencia quede desterrada». Asimismo, ha destacado que la izquierda abertzale ha dado «muchos pasos», mientras que «quien no ha dado ningún paso es el Gobierno español» y ha subrayado que, por eso, cualquier gesto que hiciera
«sería bienvenido».
«Puede hacer prácticamente todo en materia penitenciaria, como derogar la doctrina Parot, excarcelar a los presos con enfermedades incurables, hacer un cumplimiento efectivo y real de la legalidad penitenciaria a las personas que llevan ya más de tres cuartas partes de la condena cumplida», ha indicado.
Para Matute, el Estado también «tiene mucho que hacer en el terreno de la generación de condiciones para un proceso de paz y soluciones democráticas».
ETA
En relación a los rumores sobre un posible nuevo comunicado de ETA, ha apuntado que un proceso de superación de un escenario de violencia y de la propia desaparición de la banda «no se puede producir o raramente se produce de la noche a la mañana».
En este sentido, ha manifestado que, probablemente, la consecución de todos los objetivos que «certifiquen una paz definitiva se parezca más a una carrera de media y larga distancia que a una corta». «De nada sirve arrancar con una salida explosiva si a los 50 metros estás quemado y quedas fuera de la carrera, sino que se trata de mantener un buen ritmo y de ir haciendo sólido e irreversible cada paso que se da», ha añadido.
Matute ha afirmado que hay que seguir trabajando para lograr que la tregua «se convierta en definitiva» y ha asegurado que hay tareas que hay que «seguir afianzando». Tras destacar los «pasos» dados «con el cese de las amenazas, presiones y extorsiones», ha señalado que todo ello debe convertirse «en una práctica del pasado» y que a nadie «se le ocurra jamás poner de nuevo en pie».
«En la medida en que sigamos afianzando eso, yo no tengo ninguna duda de que los pasos del abandono definitivo de la violencia serán reales y palpables y visibles por el conjunto de la ciudadanía, pero no nos obsesionemos con poner fechas», ha indicado en relación a un posible comunicado de ETA.
Matute ha afirmado que no sabe el momento en el que ETA podría emitir «ese comunicado en el que dice que abandona definitivamente la violencia y que procede a disolverse», y ha recordado que en Irlanda no ha habido un comunicado de disolución del IRA y, sin embargo, «nadie duda de que se ha superado ya la fase de violencia».
Por otra parte, ha indicado que el PP y el PSOE están «empeñados en que la foto sea otra» a la del un «nuevo tiempo político» en el que se da una mayor normalización. A su juicio, lo que ellos quieren ver «sólo está en sus cabezas» porque la «mayoría de la gente» constata que la «esperanza en torno a una resolución definitiva del conflicto violento» es cada vez «más fuerte» y que los pasos dados son «sinceros y firmes».
«AFIANZAR EL PROCESO»
El líder de Alternatiba ha añadido que en «Euskal Herria» hay que «afianzar» el proceso de paz y de «soluciones democráticas» sin prestar «demasiada atención a quién gobierna en el Estado español, porque poco podemos esperar de ninguno de los dos».
«La historia reciente de la última legislatura del PSOE no nos ha concedido demasiadas opciones a la esperanza en el terreno de la pacificación y las soluciones democráticas. Y es evidente que el Gobierno del PP tampoco nos la dan», ha precisado.
Matute ha indicado que cada paso que se vaya dando «no se va a «mover, por mucho» que en el Gobierno central haya «indiferencia» o una actitud «absolutamente hostil». «Si algún día existe algún Gobierno que se atreva a ser, no ya audaz, sino valiente en el sentido positivo de la palabra para abordar el proceso de paz, bienvenido sea», ha agregado.
