El Gobierno de Uruguay ha cerrado un acuerdo con la oposición para permitir que los jubilados cualificados puedan reincorporase al mercado laboral con el objetivo de paliar la escasez de mano de obra cualificada en sectores clave para la expansión de la economía del país.
Según el acuerdo, las jubilados cualificados de hasta 70 años de edad pertenecientes a los sectores industrial y comercial podrán volver al trabajo con el mismo sueldo que cobraban antes de la jubilación por un máximo de dos años y con una jornada laboral de seis horas.
En lo tocante a las empresas, los jubilados no podrán superar el diez por ciento de su plantilla. Además, por cada contrato de esta naturaleza deberán contratar a un joven por un periodo de un año. La única limitación, es que las empresas que hayan despedido recientemente a trabajadores no podrán beneficiarse de esta medida.
Si la empresa registra dos trimestres consecutivos de pérdidas, el programa quedará cancelado, pero los trabajadores deberán cumplir sus contratos. «El objetivo es proteger a la masa de trabajadores en edad activa ante imprevistos de la economía» ha explicado el ministro de Trabajo, Eduardo Brenta.
«Creemos que es un acuerdo muy importante porque todos los actores son ganadores (jubilados, jóvenes y empresarios) y el país también es ganador», ha dicho Brenta, en declaraciones recogidas por el diario uruguayo ‘El País’.
«Si llegamos (a la reinserción) de unos 10.000 jubilados, (de un total de 398.000), podríamos hablar de un excelentísimo resultado», ha apuntado, por su parte, el presidente del Banco de Previsión Social (BPS), Ernesto Murro, a la agencia de noticias Reuters.
En 2010, Uruguay creció un 8,6 por ciento, en su noveno año consecutivo de crecimiento. El Banco Central prevé una expansión de la economía del 6,24 por ciento para 2012. De forma paralela, el nivel de paro ha descendido hasta el 5,7 por ciento, desde el 6,1 por ciento de 2011.
