¿Hace uso y abuso de su privilegiada situación Cristóbal Montoro? A tenor de su intervención del 11 de diciembre de 2013 en el Congreso de los Diputados, parece que el ministro de Hacienda no tiene por virtud la prudencia o el saber guardar silencio sobre ciertas reuniones que mantiene en su despacho de la calle Alcalá.
No es la primera vez que el titular de Hacienda sale al ruedo de Las Cortes para deslizar que los medios de comunicación españoles tienen deudas contraídas con el fisco. Como máximo responsable de su departamento, evidentemente, debe conocer cuál es la situación fiscal de todos y cada uno de los contribuyentes españoles, ya sean estos personas físicas o jurídicas. Otra cosa es que utilice esa información que, en todo caso, sólo debe interesar a la Hacienda pública y a los propios afectados para hacerla pública y además, en el caso de los medios de comunicación, lanza la piedra acusadora hacia todos, aunque en el subconsciente colectivo se sabe que las flechas ‘montoriles’ apuntan directamente y con mucha prisa hacia un grupo concreto de medios.
Lo cierto es que hoy Montoro se cogió un rebote de aúpa con las informaciones que en días pasados hablaban de injerencias en Hacienda y de supuestos tratos de favor hacia determinadas personas y empresas. El ministro no sólo se reiteró en el hecho de la falsedad de esas noticias, sino que además vino a decir, como quien no quiere la cosa que algunos de esos medios tienen problemas económicos «y es algo que no es teoría, sino que me han venido a contármelo a mi despacho».
Montoro abundó en el hecho de que ve continuamente reportajes que tratan de relacionarle «con un pasado que no es presente», en referencia a la asesoría que fundó en 2006 -Montoro y Asociados- y de la que se desligó completamente en 2008 cuando fue nombrado portavoz económico del PP en la oposición.
«Esos reportajes los veo en determinados medios que por cierto tienen bastantes problemas económicos, y lo sé porque vienen a mi despacho a contármelos, pero eso no quiere decir que tengan aplazamientos».
Con cierto aire tragicómico, el titular de Hacienda clamaba lo siguiente:
«¿Acaso no puedo decir que los medios de comunicación tienen una gran deuda contraída con la Agencia Tributaria»
NO ES LA PRIMERA VEZ
El caso es que el titular de Hacienda ya tuvo hace tiempo un rifirrafe similar en relación a las deudas de los medios de comunicación:
«A veces, los creadores de opinión tienen una proyección social, pero también tienen problemas con la Hacienda Pública. Los que tienen presencia pública son todavía más Hacienda. Hay algunos que han criticado mucho esto de las listas desde los medios de comunicación».
«Estoy señalando bastante concreto. He hablando de actividades profesionales, pero fíjese si he sido concreto que sin dar nombres, se han publicado muchos nombres al día siguiente de decirlo».
«Precisamente, este anuncio está dando resultado. Y es bueno que se conozca esa lista, que la gente lo sepa ¿o no es bueno? Los que nos dedicamos a la política lo tenemos todo publicado. Y los que están en el otro lado no. ¿Eso está bien? Además, hablan todos los días de política. Oye pues es bueno que se habla de política pero asumiendo las responsabilidades que tienen como ciudadanos».
