Diez años más tarde se convertiría en catedrático de Hacienda en la Universidad de Cantabria
Durante los años setenta el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas Cristóbal Montoro vivía junto a sus padres y su hermano menor en un piso de la madrileña Avenida de Extremadura.
La situación económica de los Montoro, emigrantes andaluces de Jaén, no era boyante. Y un día la madre del ministro recibió la notificación de embargo.
Montoro se sinceraba así en una entrevista recogida por el diario ‘lasprovincias.es‘, de la que se hace eco ‘eleconomista.es‘. Su familia se sacrificó porque tanto él como su hermano siguiesen con sus estudios.
VALIENTES
«Nosotros pasaremos esta situación como se pueda, pero estos dos estudian y seguirán estudiando»,
postulaba su madre entonces.
Diez años más tarde, el actual ministro se convertiría en catedrático de Hacienda en la Universidad de Cantabria para posteriormente ser nombrado asesor del presidente del Gobierno de la época, José María Aznar. También avanzó su carrera política como diputado, secretario de estado y ministro en dos ocasiones.
