Un total de 150 guardias civiles estuvieron cuatro meses en Francia para la operación tras cinco años de investigaciones

El Gobierno no ve una nueva dirección de ETA pues «no les queda nadie con galones»

El ministro del Interior convocó a la prensa para valorar una operación contra ETA "singular" y sin precedentes por como se encuentra la organización terrorista

El Gobierno no ve una nueva dirección de ETA pues "no les queda nadie con galones"
Jorge Fernández Díaz. EP

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, se ha reunido este jueves 24 de septiembre de 2015 con los responsables de Información de la Guardia Civil para felicitarles por la desarticulación de la cúpula de ETA.

Ha dicho que la decisión de detener a David Pla e Iratxe Sorzabal fue «muy meditada» cuando ha sido preguntado acerca de que la posibilidad de que sus sustitutos tengan un perfil más radical. «No le queda nadie con galones», ha añadido.

«Después de cinco años de estar buscándolos, después de estar más de cuatro meses teniendo día y noche a 150 guardias civiles desplazados en Francia para detenerlos, comprenderá que se tiene perfectamente asumida la decisión de detenerlos, es una decisión profundamente meditada y sin duda la más adecuada y acertada», ha dicho Fernández Díaz.

En concreto, el ministro había sido preguntado acerca de si la Guardia Civil tiene los riesgos asumidos o controlados de que al detener a esa cúpula, otros más radicales pudiesen hacerse con la dirección de los restos de la banda.

«Si encuentran a alguien dispuesto, no será ni de la ETA que hemos conocido, que ya no existe ni ejerciendo el liderazgo o la dirección que hasta ahora esas cúpulas ejercían», había declarado Fernández Díaz segundos antes sin ser preguntado por ello.

No ha querido referirse a nadie en concreto, pese a que se le ha citado a Mikel Irastorza, uno de los nombres que baraja la Guardia Civil como posible sustituto. «No hay nadie con galones», ha zanjado.

Gesto sin precedentes

En un gesto sin precedentes, el ministro ha convocado a la prensa en la misma sede de los servicios de Información de la Guardia Civil para valorar una operación contra ETA. Habitualmente se informaba a la prensa de los operativos en las instalaciones del Ministerio del Interior.

«Es porque estamos ante una situación muy singular. No hay precedentes de que ETA se encuentre como se encuentra en estos momentos», ha explicado.

Fernández Díaz ha repetido alguno de los mensajes que lleva lanzando desde que se produjo la ‘Operación Pardines’ como la metáfora en la que compara a la organización criminal con un microbus que avanza sin conductor o que ETA a día de hoy se resume a las cárceles.

En otras declaraciones ante los periodistas ha llegado a decir que las órdenes de ETA actualmente emanan de las cárceles para mantener la cohesión del colectivo.

Hoy los responsables del llamado Colectivo de Presos de ETA son los ex dirigentes de la banda ‘Mikel Antza’ y ‘Anboto’, actualmente recluidos en cárceles francesas.

En su rueda de prensa el ministro ha sido preguntado acerca de si su Gobierno ha hecho gestiones para trasladar a esos dos presos a España, pero no ha contestado.

Sobre este asunto, se ha limitado a decir que la agenda de Francia en materia antiterrorista es la agenda de España y que los encuentros del Ministerio de Justicia galo con el entorno de ETA «no ha cambiado nada». «No se va a hacer nada que no estemos de acuerdo los dos», ha remarcado.

Los verificadores «se han quedad con la brocha»
Preguntado acerca de si la reunión celebrada en Francia por la cúpula de ETA cuando fueron detenidos tenía por objeto diseñar una campaña internacional, Fernández Díaz se ha referido al registro realizado en el caserío en el que fueron detenidos los etarras así como el registro de la casa de Ramón Sagarzazu, arrestado también en la operación.

«Se abrirán en su caso más líneas de investigación, pero ahí están los verificadores que parece que se ha quedado con la brocha y sin escalera. A ETA le ha derrotado el Estado de Derecho y los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado», ha respondido, al tiempo que ha recordado que el nombre de la ‘operación Pardines’ en recuerdo del primer guardia civil asesinado por ETA «acaba de cerrar un ciclo».

«ETA si no hay una negociación previa no se va a disolver y aun así dudo de que se fuese a disolver, pero los Grapo tampoco se han disuelto nunca y son una reliquia sangrienta del pasado»,

ha expuesto.

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