Tres guardias y dos cabos de la Guardia Civil no soportan más ser parte del megadispositivo destinado a los marqueses de Galapagar, Pablo Iglesias e Irene Montero.
Según ha publicado OkDiario este 2 de marzo de 2020, el destino de Galapagar es un dolor de cabeza para los agentes, cuidar la integridad de la familia ministerial se ha convertido en una sobrecarga de trabajo para el destacamento para la Guardia Civil, se dedican a la seguridad del chalet durante las 24 horas del día, durante todos los días de las semana, una labor que lleva a cabo el destacamento que está justo de agentes.
Dos años haciendo ese servicio ha llevado al límite a los dos cabos que solicitaron un cambio de destino, y que lo tendrán a partir del martes de 3 marzo de 2020. Mientras tanto, el periódico antes indicado señala que los tres guardias cesaron sus funciones el pasado domingo.
A esto hay que sumar a dos agentes más que prefirieron iniciar cursos de especialización, pero que una vez los terminen, podrán cambiarse a un destino menos asfixiante, con estos ya serían siete los guardias que podrían decir adiós al destacamento de la Guardia Civil destinado a cuidar la vivienda del vicepresidente segundo del gobierno de España y de la ministra de Igualdad.
Lo más revelador de la publicación del periodista Agustín de Grado, es que las bajas en la seguridad del palacete de los Iglesia-Montero no serán cubiertas, los agentes se irán a buscar destinos más tranquilos, pero aún no se ha conseguido quien los sustituya, «solo está garantizada la incorporación de dos».
«El servicio de la Guardia Civil en el casoplón de los dirigentes de Podemos es unipersonal: un guardia por turno de ocho horas durante todo el día. Sólo desde finales de enero los agentes disponen de una garita para guarecerse del frío serrano en invierno». Señala de Grado.
Ante la información publicada por Okdiario, fuentes en el lugar han informado a Periodista Digital que los cabos de la Guardia Civil no tienen «previsto ningún movimiento de personal en la Guardia Civil hasta la próxima convocatoria de cambio de destino que se publicará en abril y no será efectiva hasta junio como mínimo» y además señalan que los cabos no han realizado servicio de vigilancia en la lujosa vivienda de los marqueses.
Un nuevo modelo de partido para los marqueses
Pablo Iglesias es en definitiva otro, ya lo advertía Orwell en su famosa ‘Rebelión en la Granja’, ahora es bueno tener un chalet, empleados domésticos, escoltas y por supuesto un nuevo código de ética para Podemos.
En la nueva propuesta de Código Ético para la Asamblea «Vistalegre III», Iglesias sigue mostrando sus facetas más oligárquicas, proponiendo acabar con la limitación salarial en los cargos públicos equivalente a tres Salarios Mínimos Interprofesionales (SMI). Lo que supondría acabar con una norma interna reflejada desde la fundación del partido, en 2014.
«Debido al incremento del SMI desde la llegada de Podemos a las instituciones, y ante la perspectiva de que este continúe aumentando, el SMI deja de ser un marco de referencia válido para la limitación salarial«, explica el documento.
«Las donaciones serán realizadas mediante porcentajes del salario percibido en función de las responsabilidades asumidas», añade.
Además, ya que su etapa como dirigente de Podemos lleva muchos años, pero como vicepresidente apenas meses, ahora quiere que los mandatos duren más de doce años, eso si los inscritos así lo acuerdan en una consulta.
