El Ejército cree que la lucha contra el COVID-19, solo acaba de comenzar.
En pleno inicio de la desescalada del confinamiento, el ‘informe cualitativo de predicción de la epidemia a largo plano’ del Ejército de Tierra, al que ha tenido acceso Periodista Digital, advierte que “habrá dos oleadas más de epidemia”.
A pesar de que admiten que, en verano, descenderá el número de contagios porque el calor ralentizará la expansión, también dejan claro que “habrá una segunda ola de COVID-19 al final del próximo otoño y en el invierno”.
El informe del Ejército de Tierra, sin embargo, considera que las nuevas oleadas serán más leves que la primera que aún se está afrontando.
“Dado que existirá un mayor nivel de inmunidad social por el presente brote, que se dispondrá de más medios y se reaccionará más rápido, se espera que la intensidad de esa segunda ola sea menor”, explican.
No obstante, es una batalla a la que aún le quedan meses por delante. Para el Ejército, “se tardará entre un año y un año y medio en volver a la normalidad”.
Los ‘bulos’ de una vacuna
El ‘informe cualitativo de predicción de la epidemia a largo plano’ adelanta algunas de sus conclusiones sobre la vacuna contra el COVID-19. Por ejemplo, advierte que ninguna vacuna «ofrecerá un 100% de protección» y que «ninguna vacuna que haya seguido los protocolos occidentales de ensayos clínicos podrá estar lista hasta enero-febrero de 2021».
Como si fuera poco, el Ejército de Tierra indica que «nunca habrá un 100% de inmunidad adquirida». En este sentido, confirman que “el coronavirus no desaparecerá”.
Al contrario, “habrá un porcentaje de casos de personas que habiéndose contagiado vuelvan a hacerlo. Pero lo más probable es que, en estos casos, los síntomas sean mucho más leves y no de tipo pulmonar grave”.
«El problema no es tanto el número de casos severos o muertes, sino que se acumulen todos a la vez de nuevo y colapsen los servicios sanitarios», indican.
Las soluciones
Para combatir las nuevas oleadas, el Ejercito de Tierra considera “fundamental vigilar y estar preparados para la siguiente ola”. En este sentido, también plantean avanzar en otros ámbitos.
Por ejemplo, indican que “sería extremadamente importante disponer de una aplicación de teléfono móvil de control contactos para próximas oleadas”.
A lo que agregan que, “si bien las medidas de confinamiento ayudan a quitar fuerza a la epidemia, pero no van a terminar con ella”. Por esto, “el mayor peligro en el futuro serán las aglomeraciones”.