El cineasta justamente pidió el voto para Pablo Iglesias en la campaña del 4M, a pesar de su ataque racial

Echenique, que tolera el racismo de Carlos Bardem, acusa a Monasterio de ser «heredera de una familia de esclavistas»

El portavoz de Unidas Podemos no atacó al cineasta cuando utilizó términos despectivos y racistas para hacer mención al diputado de VOX, Ignacio Garriga

Echenique, que tolera el racismo de Carlos Bardem, acusa a Monasterio de ser "heredera de una familia de esclavistas"
Carlos Bardem, Pablo Echenique y Rocío Monasterio PD

La lucha de Pablo Echenique contra el racismo es igual que la de Irene Montero por la igualdad… a conveniencia política.

El portavoz de Unidas Podemos se está rasgando las vestiduras para respaldar el show al estilo ‘Black Lives Matter’ que Serigne Mbayé protagonizó en la Asamblea de Madrid.

Sin embargo, a Echenique no se le percibió el mismo entusiasmo en la lucha contra el racismo cuando uno de sus amiguetes, Carlos Bardem, atacó al diputado de VOX, Ignacio Garriga, por su color de piel y pensamiento ideológico.

Es importante recordar que, en mayo de 2020, Ignacio Garriga confundió a Alberto Garzón con su hermano y este patinazo le sirvió a Carlos Bardem para mostrar su faceta más racista: “El Tío Tom no está bien informado”, aseveró en las redes sociales.

Tío Tom es el personaje principal de la novela escrita en 1852 por de Harriet Beecher Stowe con el título ‘La cabaña del tío Tom’.

El término «Tío Tom» se utiliza en EEUU como un despectivo calificativo para cualquier persona de raza negra, para restregarla su supuesta condición de ‘subordinado‘. En la sociedad nortamericana, donde han hecho carrera y millones otro hermano Bardem, es un insulto de extrema gravedad, más ofensivo incluso que el de ‘nigger‘.

A pesar de lo ofensivo de su comentario, desde Podemos no salieron en defensa de la dignidad del diputado de VOX. Al contrario, ‘premiaron’ a Carlos Bardem permitiendo que junto a otros cineastas realizaran un corto pidiendo el voto para Pablo Iglesias en las elecciones autonómicas para la Comunidad de Madrid.

Resulta, por lo menos irónico, que ahora Pablo Echenique ‘enloquezca’ contra Rocío Monasterio por puntualizar que Serigne Mbayé ingresó ilegalmente a España, ya que lejos de ser un insulto, es un dato que ha sido reconocido por el propio político de Podemos.

Basta con hacer una rápida búsqueda por internet para encontrar que “en 2006 embarcó en una patera rumbo a España que finalmente llegaría a Tenerife, donde permaneció internado cuatro días en un CIE. Posteriormente Cruz Roja Española le trasladó a un centro de acogida en La Coruña durante una semana, para posteriormente mudarse a Madrid”.

Sin embargo, para el portavoz de Unidas Podemos este dato resulta más ofensivo que tildar “Tío Tom” a un diputado de un pensamiento ideológico distinto.

“En verdad, lo más grave no es que Rocío Monasterio exhiba su racismo contra su señoría Serigne Mbayé. Al fin y al cabo, es heredera de una familia de esclavistas cubanos. Era de esperar. Lo más grave es que la presidenta de la Com. de Madrid es socia de este odio y lo blanquea”, afirmó en las redes sociales.

 

La lucha ‘antiracista’ de Echenique resulta tan oportuna que recuerda a cuando Irene Montero lucha contra el machismo, siempre que no esté vinculado con el ‘Caso Dina’ o con la prostitución de menores tuteladas en Baleares.

Una máquina de bulos

En las últimas horas, Echenique ha protagonizado la difusión de dos bulos a través de sus cuentas de redes sociales.

El portavoz de Unidas Podemos, acostumbrado a publicar ‘bulos’ y ‘fake news’ que pasan desapercibidos para ‘Newtral’ o ‘Maldita.es’, llegó a atribuir la crisis económica de 2008 al Gobierno del Partido Popular, a pesar de que durante dicho año el presidente era José Luis Rodríguez Zapatero.

En su cuenta de Twitter, Echenique afirmó: “En la crisis de 2008, con el PP, tardamos casi 12 años en recuperar el empleo perdido”. Sin embargo, el exlíder del PSOE que ahora se codea con las peores dictaduras de América Latina fue quien dirigía Moncloa desde 2004.

La trola de Echenique llega solo horas después de que fuera desmentido por afirmar que España lidera la vacunación COVID en la Unión Europea.

Para el locuaz y lenguaraz político morado, nuestro país está a la cabeza de Europa en la inoculación de dosis contra el coronavirus.

De hecho, lo que le hace venirse arriba es una noticia que nada tiene que ver con las vacunas, sino con la aprobación de los primeros miles de millones de los fondos comunitarios de rescate económico:

El problema es que, precisamente, España no ocupa un lugar puntero en lo que a la administración de dosis contra el COVID-19 se refiere.

Porque, para empezar, estar a la cabeza significa estar arriba del todo, es decir ser el número 1.

Pero España no está ni primera, ni entre las tres primeras y, ni siquiera, entre las diez primeras. Ocupa el puesto 11, es decir más cerca de la mitad de la tabla.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA
Autor

José Antonio Puglisi

Periodista italovenezolano especializado en economía y periodismo de investigación.

Lo más leído