Suscribimos de principio a fin las palabras del periodista Carlos Herrera cuando ha dicho que «este Gobierno no tiene luces» y sus miembros «van como pollos sin cabeza».
Tan desnortado está el Ejecutivo sanchista que, como el camaleón, cambia de color, en este caso de opinión, según la ocasión.
Para meternos en materia, lean estas declaraciones efectuadas por Teresa Ribera, ministra de Transición Ecológica, el 13 de enero de 2021 cuando le preguntaban por la propuesta de Unidas Podemos de nacionalizar empresas eléctricas como Endesa. No tiene desperdicio:
No consideramos algunas propuestas que vienen de nuestros socios del Gobierno de coalición de nacionalizar o crear una compañía eléctrica estatal. No es una buena idea.
Pues bien, ha pasado poco más de medio año y ahora la titular ministerial y vicepresidenta tercera sopesa hacer suya la propuesta del partido podemita, entre otras razones tras salir en tromba la tropa morada con movilizarse en las calles.
Así se manifestaba en la Cadena SER el 12 de agosto de 2021:
Movilizarse contra la subida de la luz es como movilizarse contra el incremento del precio del petróleo. Está bien, es una señal de protesta, pero el problema es encontrar soluciones. Hemos hecho una apuesta de Gobierno, de los partidos de la coalición, muy importante, para dar cobertura a los consumidores vulnerables al máximo y también cobertura de los consumidores medios y yo creo que esto es muy relevante, incluida la modificación de las reglas de mercado, de generación, en su caso, el poder disponer de toda la energía hidroeléctrica a través de un sistema concesional, a través de una empresa pública, según se vayan liberando las concesiones hidroeléctricas, que permita intervenir o facilitar otra manera de ofertar energía.
El socio morado en el gabinete socialcomunista no podía disimular su estado de felicidad más absoluta al conseguir poner de rodillas a la ministra de Transición Ecológica y a toda la banda del PSOE en Moncloa:
Que el PSOE se abra por primera vez a nuestra propuesta de creación de una empresa pública de energía es una buena noticia.
Debemos afrontar con urgencia y valentía la situación crítica del precio desorbitado de la factura de la luz. https://t.co/3Cyrk3Bc6G
— Ione Belarra (@ionebelarra) August 12, 2021
El editorial de El Mundo de este 13 de agosto de 2021 fotografía fielmente la situación en la que está sumida el Gobierno con el tema de la luz:
Como en Moncloa no habían previsto nada y lo habían fijado todo a que, igual que sube, algún día la tarifa bajara ella sola, ahora no saben qué hacer. Y, paralizados por su incapacidad y desesperación, los ministros sanchistas claudican ante las propuestas demagógicas y panfletarias de Podemos con las que ya nos tememos que va a ser peor el remedio que la enfermedad.
Qué pensar si no de la idea deslizada ayer por la vicepresidenta tercera y ministra de Transición Energética, Teresa Ribera, de crear una empresa pública de energía tal como le exigen desde la formación morada, con amenaza incluida de tomar las calles para presionar al Gobierno del que forman parte, en el colmo del dislate y del desgobierno en el que nos encontramos.
Basta recordar que la propia Ribera rechazaba esta medida a principios de año y la desdeñaba asegurando que «no solucionaría nada». Y no es que haya cambiado de opinión. Es sencillamente que la ministra se está luciendo con su desastrosa gestión, sus vaivenes y su falta de un plan para afrontar este importantísimo reto.
