El plan que tiene Ione Belarra, ministra de una cartera inventada por cuota, en la nueva Ley de Vivienda, contra los constructores y empresarios, es para echarse las manos a la cabeza y después, a correr.
Lo contó en Hoy por Hoy de la Cadena SER este 8 de octubre de 2021, dejando absolutamente atónito a Aimar Bretos.
Belarra: No os preocupéis que en los próximos días vamos a dar a conocer todos los detalles: puedo avanzar que va a producirse una reserva de todas las nuevas promociones del 30% para vivienda protegida, y de ese 30, la mitad para alquiler social. Es una medida para toda la construcción sea pública o privada.
Bretos: O sea si yo mañana, promotor, hago una promoción de vivienda de lujo en Sotogrande, ¿el 30% va para alquiler social?
Belarra: Efectivamente, es la mejor medida para construir sociedades más igualitarias, más libres y más felices, que es nuestro objetivo.
Bretos: Ahora mismo habrá empresarios llevándose las manos a la cabeza.
«¡Analfabetos! ¡Ignorancia, arrogancia!»
Y de ahí, como decía el entrevistador, no solo los empresarios y constructores, que seguro, sino los propios analistas y políticos con pegada e influencia social.
Lo hacían a través de redes sociales, por ejemplo, el empresario y exdiputado Marcos de Quinto, el economista Daniel Lacalle, el eurodiputado Hermann Tertsch o el periodista (OkDiario) Carlos Cuesta.
España, quién te ha visto y quién te ve!
Nadie pudo jamás imaginar que pudiera llegar a ser gobernada por semejantes analfabetos. Ni siquiera ellos mismos… https://t.co/X26qOAfmmJ
— Marcos de Quinto (@MarcosdeQuinto) October 7, 2021
Es tal combinación de ignorancia, estulticia y arrogancia que es difícil de creer:pic.twitter.com/2cx82JS5xK
— Daniel Lacalle (@dlacalle) October 7, 2021
Hermann Tertsch: Todos los grandes crímenes comunistas han tenido la misma justificación: hacernos felices hasta en contra de nuestra voluntad.
RESULTADO: Más de 100 millones de muertos.Carlos Cuesta: Belarra justifica el chantaje a los promotores: «Así construiremos sociedades más felices». Claro. Justo así es el comunismo. Todos felices… Por eso todos se escapan de su miseria y violación de derechos y van a sociedades con respeto a la propiedad: