Juan Carlos Campo, ministro de Justicia entre enero de 2020 y julio de 2021, es nombrado el 29 de noviembre de 2022 magistrado del Tribunal Constitucional. También es nombrada como magistrada Laura Díaz, que fuera una de las ‘fontaneras’ de Moncloa. Ejerció como Directora General de Asuntos Constitucionales y Coordinación Jurídica del Ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática y antes había ocupado el puesto de Directora del Gabinete del Secretario de Estado de Relaciones con las Cortes.
Estos nombramientos son los dos que le corresponden al Gobierno por Ley, aunque tradicionalmente se esperaba a que el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) designara a los otros dos que completan el tercio de cuatro magistrados pendiente de renovación. En esta ocasión, desde el Gobierno ya se había anunciado que no había intención de esperar a que ‘moviera ficha’ el órgano de gobierno de los jueces.
Campo salió del Ejecutivo en julio de 2021 en mitad de una guerra interna que lo enfrentó a Irene Montero precisamente por la Ley del Sí es Sí que tantos quebraderos de cabeza le está generando en la actualidad a la ministra de Igualdad. Campo y Carmen Calvo, entonces en la vicepresidencia, fueron los más contrarios a las decisiones de Irene Montero y el choque de trenes en el Gobierno de coalición se saldó con la salida de ambos, Calvo y Campo, del Consejo de Ministros. Además, la figura del titular de Justicia estaba muy quemada por los indultos a los presos del procés.
Tras abandonar la cartera de Justicia Campo solicitó su reincorporación como magistrado en la Sección Tercera de la Sala de lo Penal en la Audiencia Nacional, donde volvió, finalmente, en septiembre de 2022. Ahora vuelve a un puesto estratégico para Moncloa, como ocurrió con su predecesora Dolores Delgado que pasó del Ministerio de Justicia a la Fiscalía General del Estado.
Una pareja con poder
Juan Carlos Campo forma con Meritxell Batet una de las parejas más influyentes de la política nacional. Batet es desde mayo de 2019 presidenta del Congreso de los Diputados, es decir, la tercera autoridad del Estado por debajo del Rey Felipe VI y el presidente del Senado Ander Gil. En fechas similares empezaron su relación sentimental Campo y Batet.
Meritxell Batet.
La presidenta de la Cámara Baja es una ‘socialista pata negra’, una histórica del PSC (Partido Socialista de Catalunya). Nacida en Barcelona en 1973, se licenció en Derecho por la Universidad Pompeu Fabra de la Ciudad Condal y se inició en política en la Agrupación de Gràcia del Partido Socialista de Catalunya (PSC) comenzando a destacar a principios de los noventa junto al exministro Narcís Serra.
En cuando a su vida personal, en 2005 se casó con el diputado cántabro del PP, José María Lasalle, un hombre clave en los gobiernos de Mariano Rajoy, donde ejerció de s¡Secretario de Estado de Cultura desde 2011 a 2016. Con él tuvo dos hijas mellizas: Adriana y Valeria. Sin embargo, el matrimonio se rompió, en buenos términos cuando Lasalle dio un giro a su vida íntima. En 2019 Batet inició su romance con Juan Carlos Campo, formando una de las parejas más influyentes de la política española.
