El ex diputado en el Congreso de los Diputados de España, Mario Garcés, ha participado en La Retaguardia, para analizar el panorama político.
Una de las principales reflexiones es el peligro que representa el actual presidente de Gobierno, Pedro Sánchez. Estima que es un rival diferente a todos los otros políticos en los años de democracia porque el proyecto que lidera implica la destrucción de todo lo que se había construido.
“Él asume que está al frente de un bloque político. El PSOE es un mero instrumento servicial del poder del presidente socialista que forma parte de una amalgama de otras organizaciones políticas. Es un frente”.
Para poder atacar un frente hay que entenderlo y comprender las particularidades de la geografía española. Por ejemplo en el País Vasco o en Cataluña puede expandirse ese posibilismo regionalista que tienen los socialistas.
“A Sánchez le da igual que el PSOE se derrumbe individualmente”.
Hay que atacarlo con inteligencia. No se puede asumir sus principios ni la posición demoscópica, como por ejemplo, la relación con VOX. Además de comprarle la mercancía averiada a los socialistas, estigmatizas a un grupo de votantes que serán muy complicados de absorber.
Sobre el caso Koldo, estima que las Comisiones de investigación no servirán de mucho a nivel legal pero sí en lo político. Eso sí, siempre que no se caiga en el “y tú más”.
“Hay que dominar el discurso y el pensamiento político”, considera.
Se muestra contrario a que no se haya llamado a Begoña Gómez a la comisión de investigación. Señala que “nunca ha habido un caso como este porque una mujer del presidente de Gobierno, sobre la base de ser la pareja del mandatario, que tampoco cuenta con una carrera ni con una formación, de pronto le asignan una cátedra, recibe financiación de un empresario al que recomienda en un proceso de contratación pública, es que tiene que comparecer. Eso no lo ha hecho nadie”, concluye.
