La abogada Cristina Almeida negó hoy que hacer «uso de la palabra» sea presionar al Tribunal Supremo al ser preguntada por las críticas al acto en la Universidad Complutense en contra de la causa abierta por prevaricación contra el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón por la investigación de crímenes del franquismo.
Almeida se pronunció así en un encuentro de las Juventudes Socialistas de Castilla-La Mancha, donde participó en una mesa sobre jóvenes y emancipación, con relación al acto en la Complutense convocado por los sindicatos en contra de lo que, según dijo, mucha gente considera que se «está haciendo mal» y no en apoyo a Garzón.
«Garzón es la víctima de toda una serie de enredos que vamos a ir viendo cada día, porque yo no he visto en mi vida una querella por prevaricación, que cuesta más que encontrar una aguja en un pajar, y que de repente ahora parece que hay un saldo de prevaricación y cada día hay una prevaricación nueva», dijo.
En este sentido, afirmó que «lo que se dijo allí –en el acto en la Universidad Complutense– es lo que pensamos mucha gente y lo que creemos que el Supremo está apoyando y que nos parece que el Supremo no debe apoyar», haciendo hincapié en que no se trata de presionar. «Van a ser presiones lo que no les gusta», agregó.
«La única expresión que podemos tener para hacer llegar nuestro sentimiento es la palabra y eso se está haciendo, y si se sienten perturbados como si se sienten machacados, más machacados están las victimas de la dictadura que todavía están buscando sus muertos en las fosas», remachó.
Cristina Almeida participó esta tarde en el marco del foro de Juventudes Socialistas que se celebra en Toledo donde habló de lo que para ella es ser independiente y que tiene que ver con la independencia «ideológica, personal y afectiva» y no con tener una hipoteca o vivir de alquiler, ni con la crisis.
