La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha asegurado hoy que «sería bueno para todo el mundo» que la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatut «saliera con rapidez», y ha denunciado que hay en marcha una campaña para deslegitimar al árbitro del Estado autonómico.
En una entrevista en Catalunya Ràdio recogida por Efe, la número dos del PP, pese a no ser preguntada por las declaraciones que la presidenta del TC, María Emilia Casas, hizo ayer, ha coincidido con su diagnóstico.
Casas pidió ayer respeto a la institución que preside ante lo que considera una «desproporcionada e intolerable campaña de desprestigio emprendida desde ciertos sectores políticos y mediáticos».
En la misma línea, De Cospedal ha dicho ser consciente de que en Cataluña hay «muchas maneras distintas de pensar», pero ha añadido: «Desde luego me niego a contribuir a esta campaña de intento de deslegitimar al Tribunal Constitucional».
En un momento en que tripartito y CiU tratan de consensuar una resolución unitaria para que el Parlament pida al menos la renovación del TC, la dirigente del PP ha alertado de que «a estas alturas del partido» plantear «un cambio del órgano no parece la fórmula más adecuada para garantizar la independencia judicial».
«Cuando tenemos una Constitución que nos hemos dado entre todos y que fija un arbitro, o respetamos entre todos las reglas del juego o este invento se nos puede terminar o puede tener malas consecuencias», ha advertido De Cospedal, quien ha insistido: «Es bueno estar a lo que diga el TC».
Preguntada por si confía en que haya sentencia en uno o dos meses, ha asegurado que le «gustaría», porque resolver ya esta cuestión «tranquilizaría muchas cosas» y daría al TC «otro clima de trabajo», además de ser «lo mejor para los catalanes».
En cualquier caso, ha remarcado que si la sentencia no se da a conocer «con rapidez», lo importante es «que llegue a salir».
Por otra parte, ha dicho no tener constancia de que el presidente del PP, Mariano Rajoy, pueda aprovechar su presencia en Cataluña este jueves para reunirse con el presidente catalán, José Montilla.
Sobre la reforma del Estatuto de Castilla-La Mancha, retirado ayer de las Cortes con el voto a favor de los diputados socialistas y el rechazo de los del PP, De Cospedal ha insistido en culpar al presidente castellanomanchego, José María Barreda, de su fracaso.
Ha lamentado que «habiendo acuerdo en el 99% del texto», hoy no haya reforma del Estatuto, y ha dicho que la propuesta hídrica del PP, «más allá de la semántica, era más eficaz y real que la del PSOE».
«Por eso ha sido un error, por una cuestión de apariencia más que de realidad, no aprobar la reforma del Estatuto», ha reprochado la presidenta del PP en esa comunidad a Barreda.
