El presunto ‘cerebro’ de la trama ‘Gürtel’, Francisco Correa, y el ex secretario de Organización del PP gallego, Pablo Crespo, serán excarcelados el próximo 17 de enero para acudir a la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) para someterse a una prueba caligráfica a instancias de la Unidad Central de Delincuencia Económica y Fiscal (UEDF).
En una providencia fechada el pasado 1 de diciembre, a la que tuvo acceso Europa Press, el magistrado instructor Antonio Pedreira ha señalado la práctica de la prueba para el próximo 17 de enero, citando también al abogado Luis de Miguel Pérez; al ex vicepresidente de Repsol José Ramón Blanco Balín; a la mujer de Correa, María del Carmen Rodríguez; al contable de la red corrupta, José Luis Izquierdo; al empresario Jacobo Gordon; y al ex alcalde de Majadahonda Guillermo ortega.
De este modo, el juez Pedreira ordena que se libre un oficio al director del centro penitenciario Madrid V para que proceda a la excarcelación de Correa y Crespo para la práctica de esta diligencia, con posterior reingreso una vez practicada la misma.
En otro escrito fechado el pasado 22 de noviembre, las fiscales han interesado que se extienda la citada diligencia respecto a Crespo y Correa a una serie de documentos incautados en el registro del domicilio de Izquierdo, así como en la firma que aparece en diversos documentos remitidos por las autoridades monegascas.
SITUACION PROCESAL
Correa y Crespo cumplen prisión preventiva desde el 12 de febrero de 2009, al igual que Antoine Sánchez. Al jefe de la trama se le acusa de dirigir un grupo organizado de personas y empresas cuya actividad se centraba en el sector de la publicidad, organización de eventos o diseño de campañas promocionales y cuyos principales clientes eran entes públicos pertenecientes a las Administraciones públicas.
Para la obtención de los contratos públicos, según el sumario, Correa «utilizaría las relaciones personales con quienes ocupan puestos de responsabilidad en dichos órganos de tal forma que consigue los mismos sin que exista una libre concurrencia en las adjudicaciones».
A cambio de los contratos, Correa «entregaría a los responsables políticos compensaciones, de naturaleza económica o de otro tipo, en la firma y en el lugar que el soliciten». El sumario desvela que los regalos iban desde coches de alta gama, relojes de lujo y viajes, entre otras dádivas.
Crespo aparece en el sumario como el segundo de la organización corrupta, encargándose de la dirección y el control del funcionamiento de las empresas de eventos. Además, era el responsable del Patrimonio personal de Correa y codiseñaba la estrategia de ocultación de los beneficios obtenidos.
