La Abogacía del Estado pedirá mañana al Tribunal Supremo que prohíba la inscripción de Sortu en el registro de partidos porque «no ha cortado con ETA», opinión compartida por el Gobierno, que ve «elementos suficientes» para demostrarlo, y por el PP, que la sigue considerando como una «franquicia» de la banda.
La demanda contra Sortu será presentada formalmente mañana en el Supremo, donde los dieciséis magistrados de la Sala del 61 deberán dictaminar si, como concluyen los informes remitidos a los servicios jurídicos del Estado por las fuerzas de seguridad, Sortu no es más que un instrumento de Batasuna «al servicio de ETA».
Esta decisión de la Abogacía del Estado se ha conocido un día después de que fueran detenidos en Vizcaya cuatro miembros de la banda terrorista, tres de los cuales son, a criterio de la Guardia Civil, los presuntos asesinos del inspector de Policía Eduardo Puelles.
Estos arrestos fueron celebrados por los partidos democráticos, pero no motivaron ninguna declaración pública de Sortu.
El ministro de Justicia, Francisco Caamaño, ha asegurado que los informes policiales contienen «elementos suficientes» para apoyar la ilegalización de la nueva marca de la izquierda abertzale, que, en palabras del vicepresidente tercero del Gobierno, Manuel Chaves, ayer perdió «una gran oportunidad» de hacer creíble su oferta al no pronunciarse tras las detenciones.
El presidente del PP, Mariano Rajoy, ha señalado que no se sentía sorprendido por ese silencio puesto que Sortu «es una franquicia de ETA que pretende burlar la ley» y ha garantizado que su partido hará todo lo posible para que no estén presentes en las próximas elecciones.
La parlamentaria autonómica vasca de Aralar Aintzane Ezenarro ha opinado, por su parte, que no ha echado en falta ningún pronunciamiento de Sortu y ha subrayado que ese silencio «sí que sería algo a tener en cuenta» en caso de producirse un atentado.
Ante esta situación, la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) ha afirmado que las detenciones de ayer demuestran que ETA no tiene intención de abandonar las armas, por lo que ha reclamado «la misma contundencia con el brazo político de ETA que con sus pistoleros».
La demanda de la Abogacía del Estado considera que Sortu es un «argumento táctico» de la Batasuna «que no ha cortado con ETA» y reclama al Alto Tribunal que, mientras resuelve el fondo del asunto de fondo, pida al Ministerio del Interior que mantenga suspendido el trámite de inscripción de Sortu, de modo que este partido siga «hibernado» y sin capacidad de actuar.
Además, el Supremo recibirá en los próximos días la demanda de la Fiscalía General del Estado, que también pedirá al tribunal que prohíba la inscripción de Sortu por considerarla «una continuación» de Batasuna.
