La Audiencia Nacional pide a Cuba la entrega de uno de los ‘etarras balseros’

El juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco ha socilitado a las autoridades cubanas la entrega del miembro de ETA José Etxarte. Su Juzgado, que dictó una orden de busca y captura contra el etarra, conoció su paradero después de que intentara, junto a los históricos miembros de la banda Elena Bárcena y Javier Pérez Lekue, abandonar la isla y alcanzar en barco territorio venezolano.

Así, en un auto hecho público este jueves, Velasco propone al Gobierno que solicite la extradición a Cuba y precisa que tras la huída por mar de los conocidos como ‘etarras balseros’, tuvo conocimiento de que Etxarte reside en la localidad de Miramar, un municipio de La Habana.

El magistrado procesó a Etxarte, alias ‘Rizos’ y ‘María Antonia’, en marzo de 2010 por la comisión de delito de tenencia de explosivos en colaboración con banda terrorista en la causa en la que investiga la existencia de nexos entre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y ETA.

Recuerda ahora en su auto que el delito que motiva la extradición encaja, al tratarse de terrorismo, en los previstos en el Tratado de Extradición que España mantiene con Cuba y en los compromisos internacionales suscritos por las autoridades isleñas.

Tras el procesamiento el juez Velasco ordenó a miembros de las Fuerzas de Seguridad del Estado viajar a Colombia para mostrar a nueve antiguos miembros de las FARC las fotografías de los procesados –entre ellos la de Etxarte– para que confirmaran si se trataba de los mismos que colaboraron con la guerrilla.

El juez señalaba en su auto que, según un documento intervenido en 1999 al exdirigente etarra José Javier Arizkuren Ruiz, ‘Kantauri’, Etxarte había solicitado autorización a la organización para efectuar pruebas en Venezuela consistentes en el lanzamiento de granadas o morteros con 40 kilos de explosivo con los que pretendía alcanzar una distancia de 600 metros.

Velasco decía también que Etxarte había sido deportado en 1986 por las autoridades francesas a Cabo Verde, ‘desde donde huyó para refugiarse en Cuba’.

Los tres ‘etarras balseros’ fueron detenidos por la policía venezolana después de que su barco encallase en las costas de este país. Huyeron de Cuba y recalaron en Haití desde donde emprendieron su travesía en barco, a bordo de un velero, el ‘Silver Clouds’ (Nubes de Plata).

La embarcación encalló en la pequeña isla venezolana de Los Roques –un destino turístico de este país– y todos ellos fueron detenidos por un delito de entrada ilegal en Venezuela y deportados posteriormente a la isla caribeña.

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