ETA.- Arregi pide que el futuro no se base en razones que motivaron los asesinatos, lo contrario al acuerdo de…

El ex consejero de Cultura Joseba Arregi ha pedido que el «futuro de la sociedad vasca», su «definición política», no se base «en las razones que motivaron y legitimaron el asesinato de padres, hermanos, parientes y amigos» por parte de ETA, es decir, «lo contrario de lo que proclama el acuerdo de Gernika, que ha pasado para algunos a ser la nueva Biblia de la política vasca» y parece que es la «revolución francesa».

Asimismo, ha considerado que la disolución de Ekin «es el suicidio de uno que estaba muerto», aunque algunos lo «vendan» como un gran paso. En este sentido, ha criticado que, «como por arte de magia, los asesinos y sus acompañantes se están convirtiendo en los héroes»».

Arregi ha realizado estas declaraciones en un acto en San Sebastián donde ha recibido el X Premio Internacional Covite 2011 a la actuación en favor del recuerdo y apoyo a las víctimas del terrorismo.

Allí, han participado la presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, Maite Pagazaurtundua, la presidenta del Parlamento vasco, Arantza Quiroga, la directora de Atención a víctimas del terrorismo del País Vasco, Maixabel Lasa, el viceconsejero de Seguridad, Miguel Buen, y el delegado del Gobierno en el País Vasco, Mikel Cabieces.

Asimismo, han acudido los dirigentes del PP Borja Sémper, Juan Carlos Cano, Ramón Gómez y Pilar Elías, viuda de Tomás Baglieto, asesinado por ETA. El miembro de la Fundación para la Libertad, Teo Uriarte, ha conducido este acto en el que también ha participado el vicepresidente de Covite, Silverio Velasco, entre otros.

Joseba Arregi ha recogido este premio, según ha reconocido, «cansado, aburrido, entristecido, desilusionado y bastante harto». El ex consejero ha denunciado que los «asesinos y sus acompañantes se están convirtiendo en héroes, son ellos los que nos traen la paz, como se atrevió a proclamar un líder político».

«Son ellos los que reflexionan, los verdaderos demócratas, los que abren el proceso democrático y tienen derecho a dirigir nuestras instituciones», ha señalado, para añadir que «son ellos los que se colocan en la trayectoria de las víctimas de la guerra civil y de Franco, reclamando así para ellos, para ETA, la legitimidad de esas víctimas».

Arregi ha insistido en que «son ellos los que se creen en el derecho de reclamar pasos a los demás, al estado, porque, en su opinión, ellos ya han hecho lo suficiente». «Siguen con la misma táctica de condicionar, al precio que se les ocurra en cada momento, sus decisiones», ha denunciado.

FRANCO PERVIVE EN ETA

Según ha dicho, «no se dan cuenta, o se dan cuenta, pero no están dispuestos a aceptarlo porque constatan que el resto de partidos y hasta a veces las instituciones democráticas son condescendientes con ello, que si en algo pervive Franco es en ellos, en ETA, en sus actitudes e ideas» y que el conflicto que existe es el «de ETA y su violencia terrorista, su proyecto totalitaria y excluyente».

«Si existe un enemigo de la libertad en Euskadi es ETA y todo lo que le ha acompañado y, por desgracia, todavía le acompaña porque no quieren cortar el cordón umbilical de la historia de terror compartida, y de una identidad y proyecto político compartido», ha destacado.

Por otra parte, Arregi ha señalado que «nos repiten una y otra vez que debiéramos estar contentos porque el fin de ETA está próximo», ha señalado, para precisar que las víctimas estarán «de verdad contentas» cuando tengan «la seguridad de que la historia no se va a olvidar, de que la narrativa correspondiente a los años del terrorismo no la escriban quienes lo han practicado, justificado y encubierto, de que el futuro no se va a construir sin terrorismo pero con el proyecto de los terroristas».

DESMEMORIA DE LA DESVERGüENZA

«Sólo entonces las víctimas podrán proceder a trabajar su duelo privado», ha destacado, al tiempo que ha asegurado que, «mientras tanto, tenemos la obligación de no olvidar y mantenernos vigilantes como ciudadanos» porque «estamos hartos de la desmemoria de la desvergüenza que se nos quiere imponer a todos».

El galardonado con el premio Covite ha calificado de «importante» que «haya presos que aceptan el sistema», y que desde la «izquierda nacionalista radical se afirme que su apuesta de futuro solo contempla vías política y que condena todas las formas de la violencia», si bien ha denunciado que «no llegan a entrar en el meollo de la cuestión» porque «ETA sigue existiendo» y porque «Batasuna y la izquierda nacionalista radical se muestra incapaz de condenar la historia de terror de ETA».

«La frase de condena de todo tipo de violencias no es de recibo, pues es la violencia ilegítima de ETA la que debe ser condenada, no la violencia legítima del Estado de derecho», ha subrayado.

Arregi ha hecho un llamamiento a la izquierda abertzale, pero también a todos los partidos vascos, a que digan que «el futuro político de Euskadi no se puede construir sobre la base del proyecto que sirvió para motivar, causar y legitimar los asesinatos de ETA».

En su opinión, «la garantía de que esto no va a ser así significaría volver a asesinar a los ya asesinados, porque significaría declarar que su asesinato sirvió para algo y dar por bueno cada uno de esos asesinatos».

Arregi ha recordado que las víctimas reclaman a los partidos e instituciones que «garanticen una Euskadi que nunca podrá responder políticamente a ningún proyecto que niegue esa libertad», y, en ese sentido, ha considerado que los proyectos políticos que hablan de autodeterminación y derecho a decidir «construyen un sujeto que no se corresponde con el pluralismo de la sociedad vasca y es necesariamente excluyente».

Por último, ha subrayado que «nunca la libertad de ETA fue la nuestra ni su paz será la nuestra».

PAGAZARTUNDUA

Por su parte, Pagazartundúa ha advertido de que, «mientras las identidades colectivas se construyan ajenas a las más profundas convicciones democráticas, cada construcción puede llevar explícita el germen del asesinatos» y, a su juicio, «eso no se ha avanzado en todas esas cosas que pretenden suavizar la entrada del mundo de ETA y de Batasuna, no solo a las instituciones en las que ya están, sino en otras».

Ha denunciado que ese aspecto «no se toma en consideración» y ha criticado que «se busca facilitarles y allanarles el camino». No obstante, ha señalado que «mientras esto no se aborde con sinceridad y lucidez, el futuro de nuestra comunidad no estará asegurado».

«Podrá incluso tener capítulos de mayor virulencia, desde el punto de vista de una profunda intolerancia identitaria hacia las formas no nacionalistas ideológicas, obligando, tal vez, a que tengan que someterse a ser nacionalistas voluntariamente», ha concluido.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Lo más leído