‘Entre la cruz y la señera’ es el título de un amplio reportaje publicado el pasado domingo en el diario ABC y firmado por el periodista Graciano Palomo.
En éste trabajo periodístico, fácil de leer,, básicamente Palomo describe la extraordinaria influencia, con nombres y hechos concretos a lo largo de los últimos ochenta años, que la Iglesia Católica catalana ha tenido en la construcción del nacionalismo catalán y su actual apoyo mayoritario a las tesis secesionistas que propugna CIU, ERC y buena parte de la izquierda, comunistas incluidos.
Palomo disecciona a los actuales obispos catalanes y a la abadía de Monserrat, una fundación del rey Fernando el Católico de Aragón, lugar al que el independentismo ha hecho su lugar sagrado y desde donde se reescribe falsamente la historia de Cataluña. Recuerda el periodista que los abades Marcety Escarrer «recibieron a Franco bajo palio y a los sones de su famosa escolanía…»
El Vaticano viene poniendo coto a los intentos de los obispos catalanes por desgajarse de la Conferencia Episcopal Española y formar su propio órgano catalán que responder ante Roma.
Este lunes 29 de octubre de 2012 también en el diario ABC, el mismo autor y bajo el título ‘El País Vasco, entre la cruz y la ikurriña’ desgrana cómo ETA no hubiera sido posible sin el decisivo apoyo de un sector, muy amplio, del clero vasco hasta el punto que frailes y sacerdotes escondían a los terroristas manchados de sangre en lugares sagrados.
Ahora, el obispo «españolista» José Ignacio Munilla, que ocupa el sillón de obispo de San Sansebastián que en su tiempo perteneció al obispo Setien -conocido como el obispo de los etarras-sufre el constante acoso del nacionalismo hasta el punto que cuando fue nombrado por el Papa la dimitió toda la curisa de la díócesis.
Lo más espeluznante del relato es cuando hubo clérigos exclaustrados que cometieron asesinatos y al mismo tiempo administraban los sacramentos.
Esta deriva de la jerarquía católica catalana y vasca ha provocado que el número de católicos prácticamente se haya quedado en la marginalidad en territorios históricamente con fuerte impronta católica.