La infanta Cristina ha llegado hace unos minutos al juzgado de Palma. Ha bajado la rampa de los juzgados en coche y, a la entrada, se ha bajado y, sonriente, ha saludado a su abogado y a los periodistas y se ha metido en el recinto judicial sin hacer declaraciones.
La hora exacta han sido las 9.46 de este sábado 8 de febrero de 2014.
Llegó el vehículo por una calle donde no había manifestantes, quienes ni se han dado cuenta de lo que pasaba. Cristina descendió del coche al final de la rampa, poco antes de la puerta, al lado de la entrada y se limitó a sonreir.
Ahora ya tiene que prestar declaración ante el juez Castro por la imputación por fraude y blanqueo de capitales
