El cierre del caso lleva aparejado el levantamiento del secreto. Las vigilancias y pinchazos telefónicos que la Guardia Civil lleva a cabo sobre varias personas serán desveladas. Se sabrá quiénes son los dueños de los cuatro coches que pasaron por el puente de Taragoña a la hora que el móvil fue arrojado. O de quiénes son la veintena de móviles que hicieron el mismo recorrido que Diana. Un trabajo que el juez reconoce que no ha terminado. (. Batacazo del juez a la familia de Diana Quer: archivo de la causa de forma provisional).
Alentado por la fiscal, el magistrado retira las sospechas sobre todos los investigados feriantes, amigos, novios, de Diana madre, de Valeria, de la joven desaparecida, e incluso un posible atropello fortuito. No existen indicios para acusar y no hace falta, dice en su auto, tomarles declaración judicial. (Una nueva testigo aporta unos whatsapp que dan un vuelco al caso de Diana Quer).
Al no ser Diana menor de edad, el juez no está obligado a seguir investigando, pero extrañamente sí le pide a la Guardia Civil que lo siga haciendo.