Como decíamos ayer, la operación para desactivar a Pepe Villarejo se diseñó con un aparatoso despliegue de medios que deberían transmitir tres mensajes: hay una guerra de Comisarios, unos buenos y otros corruptos, Martin Blas es el Jefe de Asuntos Internos, luego es bueno y frente a él está ‘el comisario tocapelotas’, tenebroso cabecilla de las cloacas de Interior.
Para redondear el mensaje se hacía hincapie en que Villarejo no sóo era un tipo díscolo, que disparaba por su cuenta y con su propia agenda, sino que para colmo poseía un fortuna personal, que no corresponde a un policía, luego todo a su alrededor era sospechoso.
El error fundamental de Villarejo había sido colocarse en el centro de varios frentes que convergían en el centro de su persona, de ahí «la tormenta perfecta», que le cayó encima a principios de 2015.
Las tensiones que venía sufriendo con compañeros suyos que traicionaban a la policía por un plato de lentejas, facilitando datos reservados de operaciones policiales a ciertos miembros de otros servicios de inteligencia, se unieron al vendaval que se le vino encima por atreverse a investigar a Ignacio González, el poderoso político madridista, pieza hasta entonces intocable en el tablero de ajedrez que representaban los barones del PP.
El propio González alardeaba de su impunidad, que al final se ha demostrado como más psicológica que real, creyéndose a salvo y que nadie le investigaría, por lo que aportaba y por lo que sabía.
No fueron sólo responsables del PP de Madrid los que salieron en tromba contra el comisario Villarejo cuando se supo que ya en 2011 había estado hurgando en el origen oscuro del ático de Estepona. El propio Rafael Hernando actual portavoz en el Congreso le dedicó al policía los más graves calificativos.
Incluso Rafael Merino, hizo comentarios capciosos sobre su paisano Villarejo, a pesar de que, por haber sido Alcalde de Córdoba, conocía sobradamente el origen del patrimonio familiar del Comisario.
Siendo todavía alcalde cordobés, Merino llegó incluso en su día a presentar como ejemplo de mejora para la economía de la ciudad, un proyecto de parque temático llamado Al-Mansur, que el edil visitó como acto de campaña en las elecciones municipales.
No consiguió la mayoría absoluta y el tándem IU y POSE le arrebató la Alcaldía. Entre las primeras medidas de los nuevos gobernantes cordobeses estuvo anular todas las licencias de dicho proyecto por considerarlo del PP.
Todo el PP como un ejército bien disciplinado acudió en ayuda de González, así como altos mandos del Ministerio de Interior, por lo que Villarejo, además de las presiones que hacía Cosidó tuvo que soportar las de varios responsables policiales, alguno de los cuales ha continuado en la Junta de Gobierno de la Policía e incluso ascendido.
La maniobra salvar a toda costa a González, además de policial, se realizó en el ámbito jurídico, también tal y como lo denunció en su día Villarejo, en una nota interna que elaboró durante la segunda mitad de 2011.
A medida que se van conociendo los casos de corrupción de Pujol y González se aprecia, porqué ambos tenían sensación de impunidad, ya que consiguieron paralizar actuaciones judiciales a pesar de estar en una fase muy avanzada de la investigación.
Pujol logró que las acciones sobre Banca Catalana se paralizaran y quedaran sin efecto. Incluso fue capaz de volver el sentido de la ola y hacer pasar más de un mal rato a los Fiscales Mena y Villarejo que habían osado acusarle.
En el caso de Ignacio González, se cerró en falso un sumario sobre actuaciones corruptas y pagos de comisiones al ahora político madrileño encarcelado, que solicitaba fuertes sumas con la excusa de que era para la financiación del PP.
De dichas actuaciones conoció el Juzgado de Instrucción nº 11 de Madrid, DIL 6480/09 y registro UCIC nº C/00627/09 y aunque todo quedaba probado, se clausuró de manera abrupta y sin explicación alguna, bajo la excusa de que se había filtrado a ciertos medios de izquierdas por interés político.
De todo ello quedaron copias que en la actualidad están en poder de algunos sindicatos policiales.
Aparte de la denuncia inicial, que dio origen a las diligencias, se tomó declaración a varios testigos protegidos, se autorizaron intervenciones telefónicas muy explícitas donde constaban pagos diversos, el procedimiento de cobrar, mediante bolsas de plástico con dinero en efectivo, lugares de entrega del dinero en varios hoteles y en especial el EUROBUILDING y las personas de confianza de González que las recogían.
Ante la posibilidad de que se utilizara políticamente (ya que hubo filtraciones en la Sexta TV y el diario Público), la investigación se cerró en mayo de 2010, contando para ello con el Juez Decano, quien a pesar de ser un asunto tan sensible, lo llevó un Juez sustituto, un abogado con contrato anual y funciones de Juez y pagado por la misma Comunidad donde el Vicepresidente era el centro de la investigación.
El origen de la investigación es en Colmenar de Oreja, por unas actuaciones a mediados de 2007, donde el Alcalde del PP (mujer), recibió instrucciones de González para que recalifique una parcela de MARTINSA, siendo JUAN CARLOS MARTINEZ quien hizo los tratos por parte de FDO. MARTIN.
Aunque intentaron ser discretos, la bronca fue tal en el pueblo, que la Alcaldesa abandonó el PP y no se presentó a las siguientes elecciones, a pesar de haber gobernado con mayoría absoluta.
En dicho Sumario, entre otras evidencias, aparece una sociedad llamada PRESTON CHID y como conseguidores de González entre otros un tal PEDRO PEREZ, otro llamado ANGEL CORDOBA y varios intermediarios más que captaban los pagos. Se realizan los movimientos de capitales a través de cajas de seguridad de varias entidades, entre ellas el Barclais Bank y el BSCH.
A pesar de todas estas evidencias, el sumario de cerró y todos así pudieron respirar tranquilos, más aún González que se sintió impune ante cualquier investigación que dirigieran contra él.
