EL LÍDER DE PODEMOS HABLANDO CON CARLOS LESMES

La indecente imagen de Iglesias presionando al presidente del Supremo que decidirá si le imputan

La indecente imagen de Iglesias presionando al presidente del Supremo que decidirá si le imputan

Es una imagen bochornosa. Un acusado por la justicia hablando con el juez que tiene que resolver su caso.

El vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, conversando durante varios minutos con el presidente de dicho Tribunal y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Lesmes, durante el acto del 12 de octubre en el Palacio Real.

El líder del partido socio de Gobierno que no deja de atacar al Poder Judicial está pendiente de conocer si el Tribunal Supremo le imputa tres delitos en el caso Dina-Iglesias.

¿Qué tenía que hablar un Iglesias encharcado hasta las cejas por el caso Dina con el presidente del Tribunal que debe decidir su futuro judicial? ¿Qué fue lo que dijo un Iglesias que con chulería dice que no acabará sentado en el banquillo?

Posteriormente se han incorporado a la charla el presidente del Tribunal Constitucional, Juan José González Rivas, y la presidenta del Senado, Pilar Llop.

«No contemplamos la posición a tomar sobre un suplicatorio porque en el caso de darse significaría que algunos jueces han derribado el Gobierno de coalición», dicen fuentes de Podemos citadas por El Español.

Y todo cuando siguen apareciendo conversaciones que demuestran que Podemos ocultó información al juez Manuel García-Castellón.

NUEVO CHAT INCENDIARIO

Un chat del equipo jurídico de Podemos revela que su cúpula ocultó a la Policía y al juez García-Castellón datos clave sobre el presunto robo y posterior difusión del contenido del teléfono de la exasesora de Iglesias y maniobró para presentar al actual vicepresidente segundo del Gobierno como una víctima de las cloacas del Estado en plena campaña de las elecciones generales de abril de 2019.

Podemos instrumentalizó la causa desde el primer día, según reflejan las comunicaciones a las que ha tenido acceso El Confidencial, inéditas hasta ahora.

A las 15.33 horas de ese 10 de diciembre, Elizo envió un mensaje a Dina para ordenarle que no colaborara con la Policía, pese a su teórica posición de víctima. “Que te cuenten todo y luego vemos cómo actuar, de momento no cuentes nada”, le exigió Elizo.

Dos horas después del primer mensaje, a las 17.26 horas, Elizo trasladó al resto de abogados de Podemos lo que Dina había logrado averiguar. “Que no salga de aquí bajo ningún concepto. INFORMACIÓN MUY MUY RESERVADA: Dina ha salido de la Brigada de Información. La citación no era por lo del vídeo de YouTube sino por el robo del móvil”, explicó la abogada.

“Quien está detrás del robo ha sido Villarejo. Hay una pieza secreta en Tándem a la que van a unir su declaración. Me manda ahora la copia. Hay por tanto una pieza tras la conexión Villarejo/Pablo Iglesias”. “Qué guay, buenísima noticia. Confidencial absolutamente”, reaccionó dos minutos después Marta Flor, la abogada que terminó asumiendo la defensa de Dina y el propio Iglesias en esta pieza separada del llamado caso Tándem.

Los mensajes internos de Podemos demuestran que la cúpula de formación sabía al menos desde julio de 2016 que, en realidad, los pantallazos de las conversaciones de Telegram en las que salían mensajes escritos por Iglesias habían sido hechos por la propia Dina y enviados a terceras personas, como adelantó ‘El Mundo’.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Lo más leído