Como decíamos hace tres días en Periodista Digital, a la vista de la incompetencia que está exhibiendo el presidente de Correos, Juan Manuel Serrano, exjefe de gabinete de Pedro Sánchez, y del aire que irresponsablemente han dado los ministros a la jugada, cualquier día cuelan un elefante por los scanners y nadie se da cuenta.
Se confirma que la estrategia del Gobierno socialcomunista, tratando de rascar votos divulgando las amenazas que llegan por carta, ha desatado las imitaciones’. Es lamentable.
A este ritmo y con la necesidad que tienen algunos de calentar la campaña de las elecciones autonómicas madrileñas, no habría que descartar que algún miembro relevante de Podemos o el PSOE -donde si no puedes anunciar que te ha llegado una carta con algo raro no eres nadie– reciba en su casa o en su oficina un cañón. O algo parecido.
Tendrá que ser, eso sí, antes de la votación del 4-M, porque todo gira en torno a eso y alguno anda muy histérico.
Un ejemplo es el malhadado Zapatero, que se suma ahora a esa troupe de la que ya forman parte Pablo Iglesias, el ministro Marlaska, Reyes Maroto y hasta la directora de la guardia Civil.
Ya lo avisó Carlos Alsina este 27 de abril de 2021, dejando para el arrastre a Adriana Lastra:
Durante décadas la doctrina que imperó en el ministerio del Interior, era que no se publicaban las cartas amenazantes para no animar a otros indeseables de hacer lo mismo. Se investigaban las amenazas que se consideraban serias, y si se veía pertinente se detenía al autor. Lo que no se hacía era darle mucha difusión.
Los tiempos cambian y hoy la doctrina es otra, ahora hacen lo de airear de inmediato la amenaza, antes de que la Policía llegue a chequear nada.
Para entender la estrategia de este momento, en plena campaña electoral, basta escuchar lo que contaba José María Olmo en Telecinco este mismo 28 de abril: «Es muy grave, Marlaska pidió entrar en televisión para contar lo de la navaja en directo»:
Esto es grave. Cuando el lunes por la mañana llega este envío al ministerio de Industria, el ministro del Interior pide entrar en una televisión para poder comentarlo en directo. Y eso ocurre así. No se había publicado todavía, y cuando se produce en esa televisión, casualidad, la noticia del hallazgo de la navaja, él la comenta en directo. Y acto seguido es cuando la Policía va a El Escorial y descubre quién la envió.
¿Podía haber esperado dos o tres horas el ministro del Interior antes de pasarle la nota a Lastra para saber quién había enviado eso? Yo creo que sí. Yo le pido a los gobernantes un poco de prudencia, mesura y distancia. Que están en juego unas elecciones regionales, ¿qué va a ocurrir cuando lleguen las generales?
«¡Alimaña! ¡Ojalá le revienten las meninges por las cejas!»
El tema es efectivamente muy grave porque la forma de actuar del Gobierno, en lugar de silenciar estas amenazas y dejarlas en anécdotas sin trascendencia, las ha conseguido publicitar y multiplicar los ataques de gente insana mentalmente a cualquier político.
? ÚLTIMA HORA
? Correos habría interceptado una carta con dos balas dirigida al expresidente José Luis Rodríguez Zapatero.
? #Lascosasclaras112
? https://t.co/Jd3S1QqOEX pic.twitter.com/6MEPzMFDbF— Las Cosas Claras (@cosasclarastve) April 28, 2021
Después de los primeros, le llegó también su turno a Isabel Díaz Ayuso, aunque las balas fueron interceptadas en Correos, y este mismo 28 de abril de 2021 ha sucedido lo mismo con José Luis Rodríguez Zapatero:
Según fuentes de Interior y publicado en laSexta, el centro automatizado de Correos en Vallecas ha intervenido un sobre con dos cartuchos de 38 milímetros y una nota dirigida a José Luis Rodríguez Zapatero, en la que figuraba el insulto «alimaña» y cosas tan bonitas como «ojalá le revienten las meninges por las cejas». El sobre no tenía remite.
Que siga el baile de sobres con balas, y seguirán llegando más… La forma de promocionar estos actos por parte del Gobierno así lo ha pedido a gritos.
