Julia Navarro – Escaño Cero: Dos pesos, dos medidas


MADRID, 1 (OTR/PRESS)

Occidente, o mejor dicho los gobernantes de está parte del mundo donde afortunadamente vivimos, tiene una doble moral que a veces resulta insultante. Por ejemplo, dentro de unos días se inaguraran con toda pompa los Juegos Olímpicos en China,y allí estarán dirigentes de todo el mundo haciéndose la foto en Pekín con las autoridades chinas.

En los últimos meses diversas organizaciones de defensa de los derechos humanos han venido haciendo hincapie en sus denuncias de lo que todos saben por evidente: China es una dictadura donde se violan los más elementales derechos humanos.

Muchas de estas organizaciones humanitarias ponen el acento en la situación del Tibet, donde China pisotea los derechos de los tibetanos sin que nadie se inmute.

Pero los gobernantes occidentales ya digo que tienen una doble, tripe o cuadruple moral.

A Estados Unidos por ejemplo le resulta insoportable Fidel Castro, y no permitirían que sus atletas, pongo por caso, participaran en unos Juegos Olímpicos en La Habana. Y efectivamente la dictadura castristas es un horror pero no mas que la dictadura china.

La diferencia es que la dictadura china se ha reinventado a si misma y por una parte viola los derechos humanos no permite ni un resquicio de democracia ni libertad pero se está instalando en la economía de mercado. En realidad la dictadura china aunque provenga del marxismo no es diferente de la chilena, o de lo que fue la española, es decir bendicen la economía de mercado pero sin democracia ni libertad.

Y claro, donde hay mercado hay negocio, y ahí los poderosos del mundo flexibilizan sus principios, y lo que les resulta intolerable en un lugar del mundo lo ignoran en otros.

Saddam Hussein era un dictador criminal, pero ¿cuántas democracias hay en Oriente?

¿Arabia Saudita es una democracia? La respuesta es que no, pero tienen petróleo y hacen negocio con los poderosos de esta parte de mundo, de manera que a quién le importa que no haya atletas femeninas que compitan en Pekín, o que las mujeres no puedan ni siquiera conducir un coche, o las lapiden si deciden tener una relación con alguien que no sea su marido.

China es una dictadura, y a los Juegos de Pekín acudirán países que también lo son, algunos de los cuales mantienen excelentes relaciones con el llamado Primer Mundo, bueno, con los gobernantes y poderosos del Primer Mundo.

Sí, dentro de unos días Pekín se mostrará magnifica a los ojos del mundo, y detrás de los fuegos artificiales, de las medallas y de los himnos, millones de personas seguirán sufriendo el latigo de la dictadura. Pero ya se sabe, China es país amigo, y no hay que fijarse en esas cosas, ¡faltaría más¡ el negocio es el negocio.

Julia Navarro.

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