MADRID, 5 (OTR/PRESS)
No regresa a las armas, que se sepa y de momento, pero sí ha tenido la tentación de regresar a la apología y el enaltecimiento de sus colegas de la bomba y las pistolas. De Juana Chaos, está visto, no quiere dejar de estar en los titulares de los periódicos, ni desea dejar de tener problemas con la Justicia, hasta el punto de que no se descarta que tenga que regresar «al trullo», a dormir entre rejas, por esa apología del terrorismo que están considerando jueces y fiscales, de una parte, y sus abogados defensores de la otra.
Cabe suponer que éstos le advirtieron de los riesgos que corría si regresaba a prácticas insanas y no recomendables, pero parece que la recomendación no le ha bastado, o será, acaso, que quiere tener nuevos méritos para regresar a prisión por un par de años más. De momento, parece que en esa carta que en su nombre se leyó en el acto de su recibimiento ante un grupo de etarras y proetarras, De Juana Chaos estuvo particularmente afectuoso con su jefe Txomin, de quien recibía las órdenes para matar, cuando De Juana pertenecía y dirigía el comando Madrid. Se mostró orgulloso de aquellos días, e invitó a los presentes a seguir la lucha armada. ¿Qué otra cosa es la apología del terrorismo y de los terroristas?
En este instante, policías, jueces y fiscales investigan con detalle cómo transcurrió ese acto y si la carta era realmente de De Juana. Y una vez comprobados todos los datos, es probable que De Juana regrese a prisión, de donde, según mucho, jamás debió hacer salido… Y mucho menos con los viejos esquemas con los que entró en la cárcel hace dos décadas.
Parece que no ha aprendido nada en este tiempo, y que pretendería regresar al liderazgo de la banda, después de haber sido, durante el tiempo de negociaciones del Gobierno con ETA, uno de los convencidos de la necesidad del final dialogado que entonces se buscó en vano. ¿O también era falsa su actitud a favor de aquel diálogo y tenía ya en su cabeza la carta que ahora ha dado a conocer a sus antiguos compañeros de armas y simpatizantes «de la misma causa»?
Lo cierto es que sus muy desafortunadas menciones a su jefe Txomin, sus referencias a aquellos tiempos «gloriosos» del crimen y el terror, y la invitación a sus congéneres para que sigan la lucha armada, no son aguantables en nadie, en un Estado de Derecho, y mucho menos en quien acaba de verse en libertad en medio de una condena y protesta generalizadas. La tramitación del nuevo «caso De Juana de enaltecimiento y apología del terrorismo» nos dirá el grado de severidad o amabilidad de jueces y fiscales. Pero todo apunta a que De Juana regresará a la prisión que parece echar de menos.
José Cavero.
