Fermín Bocos – Cautro de cuarenta y cuatro


MADRID, 19 (OTR/PRESS)

La Real Academia Española tiene una nueva académica. El año termina con la buena noticia de la elección de la filóloga Inés Fernández-Ordóñez para ocupar el sillón «P», vacante desde la muerte del poeta Angel González. «P» de pronombre, ha dicho la flamante electa recordando el mucho tiempo -y vocación- dedicado a estudiar los pronombres átonos. Los pronombres y la obra de Alfonso X, aquel rey sabio al que debemos el sólido forjado sobre el que se asienta el idioma castellano. Fernández-Ordóñez es sobrina del inolvidable Paco Fernández Ordóñez -junto a los Calvo Sotelo, Pérez Llorca y Jorge Semprún-, uno de los ministros más cultos que ha tenido España desde los tiempos de Jovellanos.

Por cierto, la noticia de la llegada de Inés Fernández-Ordóñez a la Academia nos ha recordado que tan docta Casa está mucho más poblada de varones que de féminas. Cuarenta,de cuarenta y cuatro,son hombres. La nueva académica se va a encontrar allí con Ana María Matute,Margarita Salas y Carmen Iglesias. Lleva retraso la Academia en esto de admitir mujeres, pero el camino está abierto.Tengo para mi que con la elección de la gran filóloga que es Inés Fernández-Ordóñez, a su manera, los académicos han querido reparar la injusticia que en su día cometieron sus predecesores al excluir a Doña María Moliner. Desmintiendo a Sánchez Ferlosio ,los tiempos cambian y ,por fortuna, no siempre nos hacen más ciegos. ¡Larga vida a la nueva inmortal ¡.

Fermín Bocos.

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