MADRID, 24 (OTR/PRESS)
Sabido que vivimos de la fe ajena, tengo para mí que la dirección del PP debería aclarar la posición patrimonial de Luis Barcenas, tesorero del partido y senador por Cantabria, y despejar las sombras que se derivan de las informaciones publicadas sobre su fortuna. Sombras que se agrandan porque, en paralelo con esas noticias, está un sumario abierto por el juez Baltasar Garzón contra Francisco Correa y otros implicados en el llamado «caso Gürtel», presunta trama delictiva creada por algunas de las personas que durante los años de la presidencia de José María Aznar fueron las encargadas de organizar los actos públicos del Partido Popular.
Con los precedentes del «caso Naseiro» -financiación ilegal del PP cuando Fraga era el hombre fuerte del partido- y con el también escandaloso «caso Filesa» -trama ilegal de financiación del PSOE-, la opinión pública está con la mosca tras la oreja. Y quiere saber qué hay de verdad en las informaciones publicadas sobre el senador Barcenas. Senador, por cierto, a quien según el decir de Miguel Angel Revilla, presidente de Cantabria, nadie conoce en la «tierruca».
Puesto que se vive más de oídas que de lo que vemos, por una cuestión de higiene democrática, convendría que Mariano Rajoy despejara públicamente todas las sombras que rodean al tesorero del partido que preside. Debería hacerlo antes de que este asunto, convertido en el «caso Barcenas», lastre las expectativas políticas del PP.
