MADRID, 8 (OTR/PRESS)
Llega la encuesta del CIS, la de mayor prestigio de entre las encuestas habitualmente divulgadas en los medios informativos, pero probablemente también la más atacada y criticada por sospechas o «presunta cocina» de sus resultados. Y en esta nueva entrega del Centro de Investigaciones Sociológicas, se aportan datos que a más de uno habrán sorprendido, por la sencilla razón de que varias encuestas recientes habían dado por hecho el descenso de intención de voto para el PSOE y el avance paralelo del PP.
Este sondeo del CIS, en cambio, sostiene que el PSOE mantiene su ventaja sobre el PP, pese a la crisis, y que frente al 65 por 100 de españoles que desconfían de Zapatero, nada menos que un 80 por 100 lo hacen de Rajoy.
Insisten estos datos en que la subida del PP de las cuentas anteriores se ha frenado. Dicho de otro modo, seguimos instalados en el empate técnico que caracteriza los últimos tiempos, cuando el partido gobernante y principal partido opositor pelean por la hegemonía y no termina de verse un vencedor claro, o las distancias son tan insuficientes que no resulta sencillo inclinarse por ninguna de las dos. Después de todo, es explicable que así suceda, cuando la distancia de las elecciones generales es aún muy grande, hasta marzo de 2012, pero siempre cabe suponer que el desarrollo de la crisis y de las medidas para afrontarla estimulan a que el ciudadano encuestado se incline por alguna de las dos actitudes enfrentadas: lo que decide el Gobierno y lo que entiende la oposición… Y de esta situación tiende a predominar ese empate que deberán resolver, en su momento, acontecimientos posteriores, o la propia reflexión personal de los votantes…
Destaca una de las reflexiones que se hacen sobre estos nuevos datos, que el sondeo se realizó justo antes de que se hiciera público el dato de que el paro, según la Encuesta de Población Activa, ya superaba los cuatro millones. ¿Esa nueva situación pudiera cambiar la percepción mayoritaria? La cultura económica y política de los españoles también podría aportar el dato siguiente, la otra medición de los parados, la que se realiza en las oficinas de Empleo, y según las cuales, en las cuentas de abril se ha comprobado un nuevo aumento, de unos 40.000 nuevos desempleados, cifras muy inferior a las de los meses anteriores.
Tampoco es improbable que muchos ciudadanos no se quieran resignar al negativismo permanente de la oposición, o que quiera acompañar al gobierno en su intento por sacarnos de la crisis con las armas de las que dispone: la inversión pública para crear puestos de trabajo, y frente a la pasividad del contrario, que se limita a oponerse por sistema, incluso en las Comunidades Autónomas en las que ejercer el Gobierno regional…
Precisamente, otro de los datos que arroja este sondeo se refiere a las perspectivas se ofrecen al ciudadano sobre la crisis: Los ciudadanos tienden a creer que dentro de un año, la economía estará mejor que ahora, mientras desciende el porcentaje de quienes califican de mala o muy mala la situación económica actual. Eso sí, la gravedad del paro sigue siendo el principal problema de los ciudadanos españoles, pero medio punto por debajo de lo que se registraba en el sondeo anterior…
En todo caso, es entendible que la ventaja del PSOE sobre el PP, sea tan sólo de ocho décimas, pese al «fuego graneado» y constante del que es objeto el Gobierno de Zapatero. Tal vez estos datos inviten al PP a reflexionar sobre su manera de hacer oposición, y acaso llegue a la conclusión de que posiblemente sea conveniente un cambio de política en el gobierno, pero que tal vez sea más urgente cambiar el modo de ejercer la oposición, con mayor disponibilidad para colaborar con quien tiene la responsabilidad de gobernar.