MADRID, 18 (OTR/PRESS)
En mi opinión el presidente Zapatero acierta al diagnosticar que es necesario modificar el actual modelo económico que nos ha llevado a la crisis que padecemos. Pero cambiar el modelo económico de un país no depende sólo de la voluntad del Gobierno. Es la sociedad entera la que tiene que aceptar el diagnóstico y las recetas para ese cambio de modelo, porque si no lo aceptan los distintos sectores de la sociedad el cambio es imposible.
Zapatero ha anunciado que se va a reunir con patronal y sindicatos y que espera fraguar un gran acuerdo. Sin duda es uno de los pasos que tiene que dar, pero no el único, porque también necesita el concurso de las fuerzas políticas y de otros sectores de la sociedad. Pero vayamos por partes. Un modelo económico no se cambia por decreto ni de un día para otro. Es un proceso largo y tienen que pasar algunos años para que se vean sus frutos.
Claro que la primera premisa es saber cuál es el nuevo modelo que propone Zapatero porque hasta ahora sólo sabemos que el presidente cree que vista la crisis económica es necesario cambiar de modelo, pero no ha explicado cuál ni qué pasos hay que dar para conseguirlo. De manera que todavía no sabemos si esa propuesta de cambiar de modelo tiene detrás un plan ya establecido por el Gobierno.
Por lo pronto, el presidente se está dando cuenta de que los cambios sólo son posibles con ayuda de los demás, en este caso con los grupos parlamentarios. Escribo esto porque el «plan» de Zapatero expuesto en el debate sobre el estado de la Nación lleva una semana siendo objeto de negociación entre los distintos grupos parlamentarios y algunas de las propuestas han sido modificadas, rebajadas, ampliadas; en fin que no van a ser aprobadas tal y como quería el presidente. Pero el Grupo Parlamentario Socialista está aceptando las modificaciones del resto de los grupos parlamentarios con tal de no sufrir un revolcón a la hora de las votaciones.
Pero más allá de las propuestas que Zapatero hizo en el Parlamento está, ya digo, su anuncio de cambio de modelo, del que no podemos opinar porque no sabemos en qué consiste. Ya digo que creo que acierta el presidente al menos en proponerlo puesto que el actual sistema es evidente que debe de modificarse en vista de la crisis, pero insisto en que nos tienen que decir cómo y en qué dirección. El Gobierno por sí sólo no puede cambiar un modelo económico, sólo proponerlo e intentar convencer a todos los estamentos de nuestra sociedad de la necesidad de cambio de rumbo. Por ahora, estamos a la espera de que el presidente nos diga dónde vamos y cómo quiere ir.
