MADRID, 10 (OTR/PRESS)
Finalmente, y una vez conocido el fallo la semana pasada, este viernes día 9, víspera de la manifestación contra el recorte del Estatut y contra el Tribunal que ha fallado el caso, se han conocido también los aspectos más relevantes que contienen tanto la sentencia como los votos particulares de los cuatro magistrados alineados con las tesis del PP, que presentó el recurso de inconstitucionalidad contra el texto aprobado por el Parlament de Cataluña, por las Cortes generales y refrendado por los ciudadanos catalanes. Una primera observación: La Vanguardia entiende que ha sido «una provocación» el hecho de que el TC haya adelantado sus plazos para publicar la sentencia justamente en vísperas de la protesta barcelonesa de esta tarde de sábado. En efecto, se había anunciado que la sentencia se divulgaría el día 12, y se conoció el viernes, 9.
Como ha señalado Montilla, no es improbable que el conocimiento del texto de la sentencia animara a más catalanes a manifestarse contra el fallo, contra la sentencia y contra los magistrados del TC y el TC mismo… Hay bastante coincidencia en poner de relieve algunos aspectos de esa sentencia, como lo hacen El País y ABC: «La Constitución no conoce otra nación que la española». Según ABC, el TC reescribe el núcleo del Estatuto y avisa de que el pueblo español es depositario único de la soberanía nacional.
A su vez, dice El País que el TC rebaja las aspiraciones nacional y lingüística de Cataluña, y que Montilla califica de irresponsable al tribunal. En La Razón se interpreta que «el TC calienta la marcha catalana al determinar que Cataluña ni es nación ni reúne condiciones para autodeterminarse. Habla luego de «los durísimos votos particulares de los magistrados conservadores, que subrayan que el Constitucional se ha hecho un daño que no se reparará en treinta años» Y a esos «demoledores votos particulares de cuatro jueces» contra la sentencia del Estatut dedica sus principales atenciones el diario El Mundo, que señala la posición de los cuatro oponentes, Vicente Conde, Javier Delgado, Rodríguez Zapata y Rodríguez Arribas, los magistrados «de obediencia a las tesis del PP» que presentó el recurso de inconstitucionalidad.
A los dos primeros jueces mencionados les parece wque debieran haber sido declarados inconstitucionales 67 artículos más de los que determina la sentencia. Zapata entiende que hay 100 artículos inconstitucionales. Y Arribas, «sólo» 27… La esencia de la sentencia la extracta en su portada el diario Público: No hay otra nación que la española, se rechaza la pretensión de imponer un deber de conocimiento del catalán, se establece que el castellano también debe ser lengua vehicular y de aprendizaje y afirma que las competencias en materia de referendos corresponden en su integridad al Estado.
¿Para eso se ha tardado cuatro años de deliberaciones previas al fallo y la sentencia de los diez magistrados? No es de extrañar que los dirigentes políticos catalanes hayan reaccionado con la dureza que lo han hecho en las últimas horas, como antes de conocerse el texto concreto de la sentencia. Y que hayan invocado las más severas posiciones. Sobre todo, por dos consecuencias prácticas de la sentencia: primera, que llega cuando el texto ya se han desarrollado unas cuarenta leyes. Y segunda, que varios estatutos reformados en la pasada legislatura dieron por buenos una serie de artículos copiados del catalán. Y ahora, cuatro años más tarde, unos cuantos magistrados dicen que hay muchos más contenidos inconstitucionales de los que se sospechaba, y que se ha saltado a la torera el texto madre que es la Constitución vigente…
