MADRID, 3 (OTR/PRESS)
Primero fue el anuncio del conseller de Economía, Antoni Castells, de que no quería ir en las listas de candidatos a las próximas elecciones catalanas. A continuación ha sido el anuncio de que Celestino Corbacho renunciará a la cartera de Trabajo para figurar, como probable número tres, en las listas catalanas de Montilla. Y ahora, desde La Vanguardia se señala a la consellera Montserrat Tura como la más probable «número dos». En efecto, se explica que, con el proceso de elaboración de las listas formalmente abierto, dirigentes del PSC consideran que el perfil de la persona que haga ticket con José Montilla al frente de su candidatura, debe de ser el de alguien con sobrada experiencia, buen cartel, que sepa lidiar en los debates, y si es mujer, mejor, ya que de momento el mapa electoral socialista está poblado sólo por hombres.
Las miradas se han puesto en las conselleres del Govern y especialmente en la titular de Justicia, Montserrat Tura, dice La Vanguardia, que señala también que José Montilla está planificando una lista con el objetivo de arañar votos, pero sin perder de vista que también debe servir para afrontar una eventual pérdida del poder y la apertura de un debate interno en el PSC. El president quiere así un grupo que pueda aguantar con cohesión cualquier circunstancia y reservará para su columna vertebral a dirigentes como Miquel Iceta, Higini Clotas, Jaume Collboni o Joan Ferran. Contando que los cabeza de lista provinciales -Joaquim Nadal, Joaquim Llena y Xavier Sabaté-, elegidos con un claro mensaje de continuidad y experiencia, también tendrían esta labor. El president abordará el debate de la cuestión a su regreso, este viernes, de China.
Según el referido informe periodístico, la composición de las candidaturas de los socialistas va a responder a unas cuantas claves tanto de presente como de eventuales futuros -el PSC sabe que debe prepararse por si queda apeado del poder-, pero lo primero, según consideran varios dirigentes, es intentar sacar el mejor resultado posible con las mejores bazas. En este sentido, consideran que es preferible no hacer experimentos y señalan que la labor realizada en el Govern por las tres conselleres (Tura, Marina Geli y Mar Serna) debe explotarse. Encuestas cualitativas que maneja el PSC otorgan una buena valoración de la titular de Justicia. Se refiere luego al «conocido el perfil catalanista de Tura y Geli», que les ha llevado a contraponer sus tesis en numerosas comisiones ejecutivas con las del president, a cuenta sobre todo del papel del PSC en el Congreso de los Diputados y su relación con el PSOE. Pero este perfil cotiza al alza tras la renuncia del conseller Antoni Castells a formar parte de las listas de Montilla, aunque no es comparable en el seno del PSC la opción del titular de Economía, que ha hecho más explícito su disenso con la línea oficial del PSC, con la actitud más prudente de Tura. La consellera daba a conocer el pasado lunes sus opiniones sobre el encaje de Catalunya a la opinión pública española en un artículo publicado en El País explícitamente mesurado.
Si lo más probable es que Geli tenga su papel en Girona, donde abre la lista Joaquim Nadal -todos los cabeza de lista del PSC son hombres-, dirigentes socialistas apuestan por la incorporación a las listas de la consellera Serna, que no milita en el PSC pero que puede vérsela en casi todos los actos de precampaña que la formación esta realizando. Todo ello con el permiso de jóvenes valores como la secretaria del Govern, Laia Bonet, y la diputada Rocío Martínez-Sempere, que tienen un puesto garantizado en la parte alta de la candidatura. Este verano se apuntó la posibilidad de que fuese Bonet quien hiciese ticket con Montilla, opción que no se descarta pero que pierde fuerza ante la consellera.
Dice, finalmente, La Vanguardia, que otro de los debates abiertos es el papel de Manuela de Madre, vicepresidenta del PSC. La ex alcaldesa de Santa Coloma y actual presidenta del grupo parlamentario, siempre ha aportado un buen número de votos -según se señala en el PSC-, pero podría plantearse otro futuro político, que podría ser el Senado. Sea como sea, el desenlace de este puzle se sabrá el día 18.
