Andrés Aberasturi – El Plis-Plas.


MADRID, 23 (OTR/PRESS)

Hay medidas de tiempo escasamente científicas pero en las que todos coincidimos incluso aunque las pronunciemos de distinta manera; así tenemos medidas como «en un santiamén», «en un abrir y cerrar de ojos» y el auténtico «pispás» (que es como dice la RAE que hay que decirlo) y que Rajoy escuchó, al perecer como «plis-plas», en boca de Rubalcaba y refiriéndose «con ironía poco fina» a una iniciativa presentada por el líder del PP hace más de un año para hacer justo lo mismo que ahora ha propuesto Zapatero.

La historia de la presentación de su iniciativa para poner límite constitucional a la deuda, fue, según Rajoy, así: «Se me pidió que dejara las ideas geniales, se me dijo que había improvisado un cambio en la Constitución como si fuera una panacea y en tono despectivo y, con ironía poco fina, se dijo lo siguiente: «Como todos sabemos, la Constitución es una Ley que se cambia fácilmente y en un plis plas va a acabar con la crisis» y esa persona fue el señor Pérez Rubalcaba, hoy líder de su partido». Y lo malo es que así ocurrió efectivamente y el candidato socialista ha tenido que reconocer que ha sido Rodriguez Zapatero el que le ha convencido en un pispás (esto lo añado yo) de la bondad de la medida.

Les están pillando en unos renuncios que, si fuera al revés, ni te cuento el partido que les sacaría el propio Rubalcaba; pero la derecha, esta derecha al menos, canta las cuarenta y no le oyen ni el resto de los jugadores. Mejor, que ya hay bastante ruido en este patio de vecindad que es España. Y más que va a haber porque la Constitución es como una casa de cierta edad y cualquier contratista sabe que si le llamas para que te reforme el baño, empiezan los «ya que» y terminas cambiando de sitio las habitaciones. Porque «ya que» hay que reformarla para esto, en un plis-plas arreglamos también lo de la sucesión y nos quitamos de encima ese resto machistorro que aun colea y «ya que» ahora parece que muchos se han dado cuenta de que lo de las autonomías así no puede funcionar, echamos un repaso al titulo octavo y «ya que» tocamos ese tema, podíamos reformar la forma de elegir a nuestros representantes, y «ya que» reformamos eso, ¿nadie me apoyaría para cerrar el Senado hasta que lleguen tiempos mejores? Es que tener abierto un chiringuito en el que no se vende una escoba desde su inauguración, pues la verdad, sale un poco caro.

Ya sé que no se va a hacer nada más que lo que se ha dicho -y eso si los nacionalistas no ponen el grito en el cielo, que los catalanes ya lo han puesto- y el resto es el sueño de una noche de verano. Pero que luego no digan que no se lo advertimos: ya puestos… Lo que realmente resulta encomiable es la tranquilidad de Rubalcaba, esa capacidad de encajador que no se inmuta ni con un pispás directo a la mandíbula. Al menos tuvo el detalle de no hablar de la pobres diputaciones y encima es partidario de que esto del Senado… ¿A que al final gana las elecciones?

OFERTAS PLATA

¡¡¡ DESCUENTOS ENTRE EL 21 Y EL 40% !!!

Te ofrecemos un amplio catálogo de ofertas, actualizadas diariamente

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Lo más leído