Carmen Tomás – Segunda lectura.


MADRID, 13 (OTR/PRESS)

El Euribor diario ha caído, el Tesoro español ha colocado mejor las letras y la bolsa se ha alegrado un poco en el segundo día de resaca, de relectura de los acuerdos adoptados en la Cumbre Europea del fin de semana en Bruselas. No fue la «purga de Benito» está claro, pero sí se sentaron las bases para la mayor coordinación de los países a medio y largo plazo. Muchos, sobre todo las agencias de calificación y los que operan con deuda pública, demandaban unos acuerdos más agresivos para el corto plazo. Lo que en realidad buscaban y buscan son decisiones más contundentes sobre el papel del BCE, quizá que éste le diera a la máquina de fabricar billetes. Puede que si las cosas no se enderezan del todo, Merkel ceda algo en ese sentido o en alguno parecido. Pero, habrá que ir paso a paso. Y tiene sentido. A los países que peor lo están haciendo y que tienen ahora los mayores problemas hay que convencerles de que hay que seguir la senda de cambios estructurales que conduzcan a una reducción significativa del déficit público y que el camino es la mayor coordinación presupuestaria y fiscal. Quizás no la alineación total, pero casi.

Italia ya ha puesto encima de la mesa de sus medidas. España lo hará en breve, en cuanto Mariano Rajoy pueda tomar posesión. Ya queda menos para ese momento. Será en la sesión de investidura cuándo el nuevo presidente adelante su plan de gobierno. Por lo que vamos sabiendo, el plan es abordar la reforma del mercado laboral y del sistema financiero. Además del desarrollo del artículo de la Constitución que fija el tope de déficit. Después vendrán todas las medidas anunciadas de mejora de la competitividad. En definitiva, una acción de gobierno que llevará a cabo con consenso o sin él y que ponga al país en la pista de despegue. Claro que no va a ser tarea fácil, ni de cuatro días. Ya nos anuncian recesión para los próximos meses y más paro. Sin embargo, se pondrán las bases para el despegue que quizás llegue hacia la segunda mitad del año próximo. Sólo falta que de verdad el traspaso se haya hecho bien y las cuentas estén claras, algo sobre lo que hay más dudas. En fin, que se acabe ya este calvario en el que por cierto Zapatero y su gobierno en funciones no han dejado de otorgar subvenciones a los amigos. Y, lo peor, aún queda otro consejo de ministros.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Lo más leído