MADRID, 29 (OTR/PRESS)
Carmen Chacón se va. Se va, pero solo un ratito con el añadido de que hay vuelo diario y directo entre Madrid y Miami. Este y no otro ha sido el mensaje central de la rueda de prensa celebrada ayer para anunciar su renuncia al escaño y decir a todos un «hasta luego».
La oportunidad para una persona como Carmen Chacón, que le gusta la docencia y que durante todo este tiempo atrás se ha sentido infravalorada e infrautlizada en el Congreso, es una oportunidad que, probablemente, cualquiera en su lugar hubiera aprovechado.
Pero al margen de la oportunidad profesional, en el fondo es también una oportunidad «política». Se aleja lo suficiente para no tener que estar al quite de la que se avecina en el PSOE y lo suficiente para estar al día de todo lo que ocurra en su partido. Se va, pero sigue aminorando los riesgos inherentes a cualquier pelea o crisis interna. Naturalmente Carmen Chacón tiene en el PSE sus propios amigos, entre ellos y de manera especial Enrique Torres Mora que es una de las personas que con más claridad ve que la que fuera ministra de Defensa, llegado el momento, tiene que dar el paso adelante y competir por la secretaría general del partido. Muchos socialistas ven en ella la cara nueva necesaria para un nuevo proyecto y su posición respecto a la problemática catalana le ha reconciliado con algunos otros hasta ahora claramente reticentes. Hay que decir que Rubalcaba también tiene a muchos socialistas detrás. En los partidos, como en la vida misma, hay gente para todo y para todos, de manera que en el PSOE habrá, con seguridad, competición interna y Chacón, yéndose, si algo no va a perder es posición interna.
No deja de ser significativo que la única persona _además de su familia_ que sabia «desde hace tiempo» de su hasta luego vía Miami ha sido José Antonio Griñán y no por ser presidente del PSOE, que lo es, sino porque es su amigo personal y político. Sus relaciones con Rubalcaba y Valenciano han sido siempre correctas pero no cabe decir que la confianza mutua y el afecto político hayan sido el vector de las mismas.
El calendario comienza a correr y aunque el asunto Bárcenas está siendo _al menos en apariencia-, un buen aglutinante interno, antes de fin de año, el PSOE está abocado a encontrarse a si mismo. El banderín de salida será la Conferencia Política y Carmen Chacón ya ha anunciado que estará en ella. Dicen que tomar una cierta distancia del atropellamiento que supone el día a día ayuda a ver con más claridad el mañana. Carmen Chacón está en ello.
