MADRID, 21 (OTR/PRESS)
A la bolsa española le quedan cinco sesiones y se ha situado de nuevo cerca de los 9.700 puntos.
El IBEX se ha anotado esta semana cerca de un 5 por ciento de ganancia, pero no parece que la que viene, atípica por otra parte, vaya a ser muy movida.
Los analistas no esperan ni volumen ni volatilidad. A pesar de ello, hay quien se atreve a situar al selectivo español en el entorno de los 10.000 puntos.
A los mercados les ha sentado muy bien la decisión de la Reserva Federal de ir retirando muy poco a poco los estímulos. Tanto que esa interpretada como buena noticia ha logrado neutralizar la que se ha montado en España a cuenta del recibo de la luz.
Las caídas de las eléctricas se han compensado con creces con las fuertes alzas en bancos y la frenética actividad de los gestores de fondos de inversión para presentar una buena cara a fin de ejercicio. En todo caso, aunque no haya rally navideño de los de antaño, la bolsa española va a cerrar en positivo y esto no lo veíamos desde 2009.
Hay que anotar la espectacular carrera de Bankia, una vez que se ha anunciado ya su entrada en el IBEX a partir del 1 de enero. La entidad está atrayendo capital extranjero.
De hecho, han duplicado su peso en Bankia ante la mejora de la gestión y de la imagen.
También esta semana hemos conocido la venta de Novagalicia Banco al venezolano Banesco por algo más de 1.000 millones lo que significa una pérdida considerable, ya que al gallego se le dieron casi 9.000 millones.
En fin, la bolsa gana casi un 18,5 por ciento en lo que va de año, así que muy mal se tendrían que dar las cosas en las pocas sesiones que quedan. 2013 se apaga, pero nos deja un buen año.
2014 si se cumplen las previsiones será aún mejor. Que así sea.
