Charo Zarzalejos – Mujeres respondonas.


MADRID, 12 (OTR/PRESS)

Han salido respondonas. Susana Díaz ha dicho que nadie se va a meter en su política de pactos, de la misma manera que nadie -es decir, Pedro Sánchez- se ha metido en «su» campaña. Esperanza Aguirre necesita menos presentación. Es ya una veterana del paisaje político y si por algo se ha caracterizado es que a ella nadie le tose.
Susana Díaz, en Andalucía y Esperanza Aguirre, en Madrid son dos focos de atención especial. Y lo son no tanto por sus programas o sus propuestas. Lo son, precisamente por ser respondonas, por el afán indisimulado de ambas de marcar territorio frente a sus respectivas direcciones nacionales, lo que obliga a los demás a guardar silencio para que las aguas no desborden el río.
Ambas tienen instinto para el poder y a las dos les apasiona la política, pero hay que reconocer que Susana Díaz tiene más claros los límites en los que debe moverse. Sabido es que Pedro Sánchez no es para ella el paradigma de liderazgo, pero se ha llegado a una especie de tregua. Si hay cuchillos, ahora se notan menos y las gotas de sangre que pudiera haber en alguna pared, se han limpiado a tiempo. Dicen los socialistas que Pedro Sánchez es ahora más líder que nunca. Atribuyen este avance a la operación que sirvió para descabalgar a Tomás Gómez. «Ha demostrado que es capaz de tomar decisiones difíciles y cuando la gente percibe autoridad, eso, al final, se agradece», aseguran en su entorno.
Esperanza Aguirre es más lanzada que Díaz. Nada ni nadie se le pone por delante a la hora de censurar o distanciarse de ese establishment que, finalmente, ha optado por su candidatura tras el denostado «dedo divino» de Rajoy. Ha tenido que ser Gallardón, desde México, quien le pidiera un poquito de por favor y son los populares de toda clase y condición quienes han augurado que «nos esperan tardes de gloria». A Cristina Cifuentes no le van a pillar en polémica alguna y el establishment va a guardar un resignado silencio.
Ni Ferraz ni Génova quieren más líos, que diría Rajoy pero si algo tienen, y eso se verá en el transcurso del tiempo, son líos. Ahí están las primarias socialistas del mes de Julio y ahí está, a la espera de resultados, el desenlace final de la tortuosa designación de Esperanza Aguirre como candidata. Los socialistas reiteran que «Sánchez es más líder que nunca» y los populares encuentra confortable asidero en el ya famoso «Rajoy no da puntada sin hilo». Ellas, las mujeres respondonas, tampoco.

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