PARA QUÉ HAS NACIDO
Has nacido para evolucionar,
y has nacido, además, para aprender,
también has nacido para crecer.
No has nacido solo para engordar.
Tampoco ha de ser todo trabajar,
ni buscar únicamente el placer,
pues encima de todo, has de saber
que tu tarea importante es amar.
Lo que hace a nuestra historia tan horrible,
con tanto conflicto tan increíble
es el vil pecado del egoísmo,
cuando el gran mandato del cristianismo
es tan elemental y tan asumible,
y es que ames al prójimo como a ti mismo.