¿A qué le hago hoy este soneto?
Se lo haré con mucho amor, a la vida
puesto que no tengo ninguna brida
que me tenga aprisionado o sujeto.
Cantaré cada cosa y cada objeto
de los que hacen mi vida entretenida,
porque mi alma está muy agradecida
ya que nunca me he visto en grave aprieto.
Mis oídos oyen bellas melodías,
mi lengua disfruta de mil sabores,
percibo el aroma de muchas flores,
y beben la luz las pupilas mías.
Y como pretendo ser biennacido,
yo le canto a la vida, agradecido.