El ‘sombrajo’ es un tenderete, que se hacía con ramas, mimbres y palos y bajo el cual los jornaleros podían refrescarse, beber o comer algo y descansar un rato del duro trabajo del campo.
Dicha construcción era muy enclenque y cualquier golpe o ráfaga de viento podía tirarlo abajo, causando la decepción de quienes intentaban cobijarse en su sombra.
La expresión ‘caerse los palos del sombrajo’, que surgió en entornos rurales hace más de dos siglos, nos viene al pelo para describir lo que está pasando con el chavista Juan Carlos Monedero.
El cofundador de Podemos, el mismo que se trajo medio millón de dólares donados a su causa por los torturadores venezolanos, intentó colarle al juez Juan José Escalonilla que los 26.200 euros cobrados de Neurona respondían a un ‘trabajo de consultoría’ presencial en México.
El juez, no convencido de los argumentos del amigo de Pablo Iglesias, pidió al cónsul de México, Isaias Noguez, que le confirmara si Monedero solicitó visado para viajar a México.
Ese documento es obligatorio para entrar en la nación americana por motivos laborales.
La carta remitida desde la Embajada de México en España el 22 de marzo al juzgado es taxativa: No existe en esta oficina registro de atención de trámite y/o expedición de visado».
Dado que los viajes a México sin visado sólo están permitidos por turismo o vacaciones o para para realizar una actividad profesional de corta duración siempre que el trabajador esté empleado y retribuido fuera de México, lo que no es el caso pues Monedero -supuestamente- viajó para una labor remunerada y contratado por una empresa mexicana, el visado era indispensable.
El juez sospecha que Monedero no hizo ese viaje para realizar un trabajo de asesoría a la empresa Neurona Consulting, sino que cobró los 26.200 euros como comisión por hacer de intermediario entre Podemos y la consultora chavista.
Monedero, que está imputado en esta causa por malversación tras detectarse irregularidades en el cobro de dinero procedente de la consultora chavista, se mostró muy ufano tras su comparecencia ante el juez. Su declaración estuvo marcada por la prepotencia habitual que caracteriza al personaje.
Según Monedero, todo quedó aclarado. Pues, a tenor de la actuación del juez, parece que no tanto, como explica Teresa Gómez en OKdiario este 26 de marzo de 2021.
Cabe recordar que en el informe de la Policía se concluye que Monedero recibió la transferencia desde México por Neurona y que la factura fue elaborada ad hoc con el fin de que la entidad bancaria desbloqueara la transacción que tenía retenida.
En su interrogatorio, Monedero intentó excusarse ante el juez de su factura fake y alegó que mantuvo conversaciones con una responsable de la empresa mexicana días antes de recibir el dinero.
Sin embargo, los correos electrónicos intercambiados muestran ciertas «irregularidades».
En un correo electrónico enviado por una responsable de Neurona Consulting le detalla los datos de la empresa a los que debería remitir la factura, pero extrañamente el fundador de Podemos giró la factura a un domicilio ubicado en un suburbio de Morelia, en el estado mexicano de Michuacán, cuna del narcotráfico.
Por todo ello, al juez no le encajan las cosa.
La coartada se desvanece y a Monedero, como decimos en el titular ‘se le caen los palos del sombrajo’.
