No sé de quién habrá sido la idea de ‘poner un cero’ delante de la cifra del año 2050, pero sospecho que habrá partido de algún ‘iluminado’ de entre esos cientos de asesores que fueron contratados a dedo por este gobierno y que pagamos entre todos los españoles (incluidos los jubilados mediante ese injusto y abusivo IRPF que nos descuentan mensualmente)
Flaco favor le han hecho al Presidente del Gobierno de España (cómo le gusta llamarse) al posar primero -hacerse la foto- y comparecer después -lucirse- en su alocución televisiva ante ese cartel en donde llama poderosamente la atención la cifra del año con
‘un cero a la izquierda’.
Porque verán…si recurrimos a su significado gramatical, según la RAE coloquialmente: “Se dice que una persona es un cero a la izquierda cuando no se la tiene en cuenta o tiene nula influencia
en las decisiones importantes”.
Pero si recurrimos a su acepción aritmética, ortográficamente se desaconseja poner un cero a la izquierda de cualquier fecha, sea día, mes y por supuesto nunca delante de un año (v. gr.: se escribe 1900 ó 2021, pero nunca 01900 ó 02021)
Pues bien, después de estas someras consideraciones gramaticales y aritméticas coincidirán ustedes en lo incorrecto del cartel que encabeza este artículo y que anunciaba la presentación del “Proyecto España 02050”.
Si sus asesores meten la pata en cosas tan evidentes y tan sencillas…
¿Qué no harán en cosas de más envergadura y trascendencia?
Sánchez intervino en el Museo Reina Sofía con motivo de la clausura de la Jornada sobre -Los fondos europeos de recuperación: así va a cambiar España- con un documento que tituló literalmente: “España 2050″, con el que pretende poner la primera piedra de un gran consenso nacional pero… ¡A 30 años vista!
¿Quien lo verá realizado?
De modo que mientras usted, Sr. Sánchez, se entretenía presumiendo de un programa político futurista -es decir, poco más o menos que vendiendo humo- otros gobiernos como el de EEUU, la UE y ahora el de Marruecos, nos ningunean como país y le tratan a usted como ‘un cero a la izquierda’.
El gobierno de Biden se posiciona al lado de Marruecos tras la reciente invasión de Ceuta y Melilla, que ha sido programada e inducida por el reino alauí, en clara represalia por la secreta, impostora y ‘falsamente humanitaria’ acogida al terrorista Brahim Ghali, con nombre y pasaporte falso y que es el líder del Frente Polisario, consentida por su gobierno y apoyada por Podemos y su ex socio Iglesias quien, siendo aún vicepresidente del gobierno, manifestó -el derecho a la autodeterminación del Sáhara Occidental- ¡Excelsa metedura de pata diplomática dicha desde su cargo!
Mientras tanto la UE pone en duda ‘el panfleto’ de intenciones que les ha enviado bajo el rimbombante nombre de ‘Plan de Recuperación,Transformación y Resiliencia’ en el que, al parecer, pretende subir impuestos y hacer valer todo excepto sus intenciones y su credibilidad, por lo que Bruselas le ha pedido más concreción de fechas, reformas e inversiones.
¡La palabrería hueca solo le sirve en España!
Sus pasos contradictorios y titubeantes, tanto en política interior como en política exterior, están consiguiendo que nuestro país haya caído en valoración, consideración, respeto internacional y también en autoestima hasta límites no permisibles, yendo camino de ser “un cero a la izquierda” en el contesto mundial.
Vergonzosa me parece, una vez más, su aptitud y la de los responsables de su gobierno ante la Invasión ‘pacífica’ de miles de marroquíes a las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, clara advertencia del gobierno marroquí quien, con una acción orquestada y cobarde ha puesto en peligro la vida de jóvenes, adolescentes, mujeres y niños para advertir a España, de forma subliminal, lo que podría ser una segunda “Marcha Verde” si enviase, en vez de nueve o diez mil, uno o dos millones de jóvenes, mujeres y niños, en la seguridad de que el gobierno español liderado por usted y sus ministros no sabría reaccionar para defender contundentemente la soberanía de las dos ciudades, dadas sus anteriores muestras de dejadez, falta de reacción, inseguridad y debilidad.
Sr. Sánchez las Fuerzas de Seguridad del Estado -FFSSE- y el Ejército -FAS- no se pueden emplear como ONGs en una invasión en toda regla como la que hemos sufrido en Ceuta y Melilla, para eso ya existen Organizaciones como Cruz Roja, Acnur, Unicef y organizaciones no oficiales, de dudosa utilidad, que son sustentadas generosamente por su gobierno con nuestros impuestos.
Las FAS tienen la obligación de impedir, con contundencia y con los medios adecuados, la invasión a la fuerza de nuestro territorio, sea por tierra, mar o aire, independientemente de si la invasión tiene carácter armado o no, defendiendo y garantizando la seguridad de los ciudadanos españoles que habitan en él.
Para finalizar habrá que recordarle, Sr. Sánchez, tres párrafos de nuestra Constitución:
** La Constitución española establece que los españoles tienen el derecho y el deber de defender a España.
** La Constitución determina que el Gobierno es el encargado de dirigir la política interior y exterior, la Administración civil y militar y la defensa del Estado.
** A las Fuerzas Armadas, la Carta Magna les asigna la misión de garantizar la soberanía e independencia de España, defender su integridad territorial y el ordenamiento constitucional.
Como colofón permítanme que les cite una hermosa frase del escritor y periodista británico J.F. Chesterton (1874-1936)
“El verdadero soldado no lucha porque odia lo que tiene delante, sino porque ama lo que tiene detrás”.
