OPINIÓN

Juan Pérez de Mungía: «El opio del pueblo y su profeta»

Juan Pérez de Mungía: "El opio del pueblo y su profeta"

Los presuntos delitos que podrían imputarse a Pedro Sánchez, son de tal magnitud y amplitud que un examen somero del Código Penal permitiría imputarle y condenarle incluso a penas de prisión, patrimoniales, e inhabilitación especial para ejercer cualquier cargo público como una pena accesoria que resultaría de una sentencia penal firme, solo por lo que ahora conocemos, y sabremos mas. El hecho de que el Presidente de Gobierno burle los dictámenes de la justicia y la Constitución Española revela cuán lejos nos encontramos de una democracia que aplique las mismas leyes a todos los ciudadanos del Art. 14 CE. Cargos políticos de todos los niveles han sido inhabilitados por delitos de desobediencia al Tribunal Constitucional (Art. 410.1 CP), pero las sentencias del Tribunal Constitucional no han tenido repercusión penal en el sátrapa monclovita.

La mera amenaza indiciaria de delitos graves han llevado a la pérdida de su cargo, a presidentes de un parlamento regional, a diputados, y a numerosos cargos de distintos niveles de la administración y la empresa pública. A los mas de 1700 causas instruidas y a los mas de 500 imputados, 20 entraron en prisión, solo hasta 2017. En los últimos cinco años no ha dejado de crecer la lista a la que recientemente se suma Mónica Oltra con múltiples indicios de comisión de delitos graves en perjuicio de una menor. El Tribunal Constitucional tendría que disponer de una fuerza militar para detener a quien no cumple las leyes. Pero nada sucede. Nada puede reprochársele porque pacte con los comunistas proscritos en todo el ámbito europeo, con los asesinos, que se cobran sus muertos, nada por su mendacidad contumaz.

Sánchez no regatea esfuerzos para burlarse de la ley y de la crítica, desde someterse al dictador marroquí para preservar su intimidad y beneficiar a su esposa, como invertir el escudo de la bandera, y repetirlo en el cónclave de la OTAN que acordó, en beneficio de España, Dolores de Cospedal. El gasto sin retorno en este cónclave cree haberle servido para, ejerciendo de mudo, repartir sonrisitas y palmaditas cual bufón de la corte del emperador del mundo. Y de nuevo se burla de las leyes cuando instala la bandera arcoiris en un organismo público donde solo debiera estar la bandera nacional. España va de cabeza con Sánchez.

¿Quién nos protege de las prácticas mafiosas del que coloca a sus huestes en todos los organismos públicos y las instituciones políticas, y vende Indra al nuevo Soros, Joseph Oughourlian, un especulador que libera de publicar la verdad a periodistas comprados mientras pacta con el gobierno la apropiación de patrimonio público en su calidad de miembro del aparato propagandístico. El Pais es solo un instrumento para adquirir del Estado Sanchista las joyas de la corona. TeleMaduro tiene una sucursal, TeleSánchez y el aparente presidente de RTVE, haciendo carrozas para el desfile del Orgullo con el dinero de los impuestos de todos los heterosexuales. No hay cuestión menor que no sirva a su propaganda.

La apropiación de los resortes del Estado, del poder económico, de la información y la justicia con el único fin de sacarle provecho privado está presente en todas sus decisiones, no solo el mencionado control de Indra, también la forzada dimisión del presidente del INE o el ejercicio continuado y abusivo de la desinformación de Tezanos en el CIS, el cese de la directora del CNI, sin olvidar el cierre del Congreso para impedir el control de su Gobierno, el asalto al Tribunal Constitucional y el nombramiento de una sectaria, con el carnet socialista tatuado en sus parietales, Dolores Delgado y su oscura intervención en la Fiscalía General del Estado TC y tantas otras maniobras para desmontar el Estado español para montar su propio Estado.

A los negocios públicos nos remitimos, haciendo gala del nepotismo y endogamia que caracteriza los gobiernos socialistas. Juan Manuel Serrano presidente de correos desarrolló la mayor parte de su carrera en la Federación Española de Municipios y Provincias FEMP y fue, también, jefe de Gabinete de la Comisión Ejecutiva Federal del Partido Socialista Obrero Español. ¿Quién ha olvidado las famosas cartas amenazantes y los sobres que pasaron todos los detectores de balas?

Sánchez no solo promueve a su mujer, que presta a Biden para las fotos, también coloca a la mujer de su amigo Ignacio Carnicero, Lorena del Rio, en una empresa pública y al mismo iñaki, como director general de Agenda Urbana y Arquitectura dentro del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) que dirigía José Luis Ábalos. Hay más, muchos más.

Tantos entresijos, zarajos y gallinejas, tantos intestinos fritos que cuando puedan desenrollarse se podrán estudiar las cloacas de un Estado cubierto de la mugre ideológica del socialismo. Los emisarios se esconden en el mar para que suelten sus contenidos fecales ya adentrados en el mar, lejos de la vista de sus votantes.

La pírrica contribución a la defensa de Ucrania le permitió esconder la comisión de un delito de revelación de secretos militares sobre la naturaleza de las armas, su recorrido, y destino en contravención del Art. 556 CP. Sanchez cosecha el máximo número de sentencias de inconstitucionalidad de toda la historia de occidente y sigue haciendo gala de su habilidad para comprar voluntades y envolverse en el autobombo de sus desvergonzados aduladores. Que le escribieran un libro, o que le hicieran la tesis doctoral forma parte de ese típico delincuente que se entrena a sí mismo en la impunidad desbordando permanentemente la legalidad. A ver quien se atreve a ponerle un cascabel al gato pardo monclovita. No es que haya perdido el pudor, es que es un digno representante del orangismo protestante que le exime al creyente de atribuirse ninguna culpa. La fe basta para salvarse. El confinamiento no existió.

El efecto devastador de su gestión sobre la economía y la política nacional es de tal magnitud que tras la desaparición del partido socialista, España quedará sumergida en una quiebra nacional, en un estado de guerra largamente promovido, en una espiral de decadencia irremontable. Feijoó, el mismo apellido de su polifacético ancestro, no será capaz de revertir el desastre, lo que permitirá enarbolar la bandera reivindicativa de nuevos oportunistas como Zapatero y Sánchez.

¿Qué nos ha traído Sánchez?. Solo ruina y muerte, ruina económica, lucha por la supervivencia, delirio de poseer un cuerpo que masturbar, un cuerpo que abortar, un cuerpo que drogar, un cuerpo que transformar, un cuerpo que suicidar. La libertad sexual imaginaria, el cambio cosmético del sexo, los discursos de género, el guerracivilismo de la irredenta memoria del socialismo fascista, de las feminazis podemitas que oportunamente vendieron su sexo a los prostibularios caciques de la política de machos alfa débiles y célibes. El mantra de la ama de llaves, la dueña de cama y mesa, en esa tradición hispánica de que pueden mas dos tetas que una carreta de bueyes, y el único recurso para escaparse, amarse a sí mismo, el mejor conocido de cuantos se desconocen. En el pasado la religión representaba el opio del pueblo. Hoy el opio es la religión climática, vegana, transexual y transgénero. Sánchez es su único profeta

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