OPINIÓN

José Manuel García Albarrán: «‘España’ de nuevo boca abajo»

Sanchez OTAN

La Cumbre OTAN celebrada en la capital de España -Madrid- cuyo éxito -cómo no- ha pretendido atribuirse el gobierno ‘Sanchista’ para sacar pecho una vez más, conclusión a la que es fácil llegar analizando las declaraciones del ministro de exteriores -Albares- que dijo, tras finalizar la Cumbre de la OTAN: “Esta cumbre, por su importancia, es equiparable a la Conferencia de Yalta o a la caída del muro de Berlín”.

Pues hombre señor Albares para ‘echarse flores’ no está mal la comparación, pero salvemos las diferencias coyunturales e históricas de estos dos acontecimientos y veamos…

Habrá que recordar que en la ‘Conferencia de Yalta’, celebrada en la península de Crimea a orillas del Mar Negro, se reunieron en febrero de 1945 Stalin (Unión Soviética) Churchill (Reino Unido) y Roosevelt (EEUU) para negociar, nada más y nada menos que el fin de la

II Guerra Mundial, que a la postre supondría el principio de la Guerra fría con el Este, tras comenzar el desmembramiento de la Unión Soviética.

Y si la comparamos con su segunda cita, es decir, con la caída del Muro de Berlín, que durante 28 años (1961-1989) dividió Alemania en dos -RDA y RFA- con el drama añadido de separar familias y amigos que sí querían verse era a costa de jugarse la vida (125 muertos y más de 3.000 detenidos) intentando pasar al otro lado de la  RDA, burlando la férrea vigilancia de la ‘Polizei’, guardias rusos, de los perros policía, ametralladoras y de las minas anti personas, razón por la que recibió el calificativo de “Muro de la vergüenza”.

Hecho este inciso, para rebatir la exagerada comparación de Albares, sí podemos afirmar que la ‘Cumbre OTAN/NATO de Madrid’ ha sido un éxito en varios aspectos…

Un éxito en Organización, un éxito en Seguridad y Orden público, un éxito en el Transporte Urbano -que era gratuito esos días para disuadir del uso particular de vehículos, habiendo conseguido reducir en un 30% el tráfico y también un éxito en el Comportamiento ejemplar de los madrileños, a pesar de las molestias que han tenido que sufrir.

En suma, un éxito reconocido por una gran mayoría de asistentes que representaban la élite del ‘Mundo OTAN/NATO’.

Pero ‘como no podía ser de otra forma’, frase preferida y repetida cansinamente por los ministros y ministras socialcomunistas que ahora se les vuelve en contra, éste éxito ya se encargaron ellos, con Sánchez a la cabeza, de ‘enturbiarlo’ o ‘empañarlo’ al haber cometido unos fallos protocolarios inadmisibles y de extrema relevancia, unos involuntarios y otros… ¿Quizá pudieron ser voluntarios?

Por si hubiésemos tenido poco con la afrenta marroquí, producida en la visita oficial de Sánchez y Albares, al colocar ‘la bandera de España invertida’, el protocolo de Moncloa falla estrepitosamente al volver a colocar de nuevo, en el lugar asignado al anfitrión del evento -Pedro Sánchez- el banderín de la enseña Nacional ‘con el escudo Constitucional hacia abajo’ como muestra la fotografía en la cabecera de éste artículo.

¿Para que sirven los más de 300 asesores que tiene Sanchez al servicio de Presidencia del Gobierno?

¿Qué hicieron los encargados de protocolo mientras colocaban los banderines de las distintas Delegaciones?

¡Esto ya es inadmisible y es una muestra de la más absoluta incompetencia!

Pero siguiendo con el protocolo, diseñado y dirigido por Moncloa, el segundo fallo fue programar la visita del Presidente de EEUU primero a Moncloa antes de visitar al Jefe del Estado -el Rey Felipe VI- aunque este se desplazara al aeropuerto militar de Torrejón de Ardoz para recibir al máximo dirigente de EEUU.

Históricamente en anteriores visitas de Presidentes de EEUU a España, Eisenhower en 1959 ya comprendió el gran valor geoestratégico de España y levantó el veto de la ‘postguerra civil’ haciéndonos partícipes del llamado ‘Plan Marshall de Reconstrucción Europea’, al entender que Franco podía ser un buen aliado en la lucha contra el Comunismo, por lo que concedió ayuda económica para el resurgimiento del País y firmó los llamados ‘Pactos de Madrid’ para financiar la construcción y puesta en marcha de las Bases americanas en Torrejón de Ardoz (Madrid) Rota (Cádiz) Morón de la Frontera (Sevilla) y Zaragoza que, además de su protección crearon muchos puestos de trabajo y suculentos ingresos en las ciudades en donde se asientan.

Pues bien… una vez roto el hielo de la postguerra y llegando a la España Constitucional, en las visitas de Presidentes de EEUU a España siempre el protocolo ha designado en primer lugar la visita al Jefe del Estado -Rey de España- y posteriormente al Presidente del Gobierno, al Congreso, al Senado, etc.

¡Nuevo suspenso en Protocolo!

Y de la Reunión o Cumbre de la OTAN ¿Que hemos obtenido beneficioso para España y los españoles?

Pues se podría decir que Madrid ha recibido una ‘inyección de millones de euros’ nada despreciable en hostelería, boutiques, comercio, etc.

Llama la atención como ‘el gobierno socialista’, otrora gritando: “OTAN no y Bases fuera” se ha visto obligado a aumentar el presupuesto del Ministerio de Defensa al  2% del PIB, adelantando 1 millón de euros, al haberle sacado los colores públicamente por ser el segundo país que menos aporta al presupuesto OTAN.

Se ha visto obligado a aumentar la presencia de la Armada de EEUU -US Navy- en Rota, con dos destructores más de última generación dotados con escudo antimisiles, aunque esto está pendiente de aprobación en el Congreso y los socios de UP y comunistas ya han mostrado ‘con la boca pequeña’, ser contrarios a su aprobación.

Según ellos… ¿habrá que seguir practicando una diplomacia selectiva? es decir, todo menos enfadarse con el ‘Patrón’ que les asegura el sustento, los escoltas y los coches oficiales.

‘Porca miseria’ la de esta política cínica y complaciente propia de estómagos agradecidos.

Y por último se me ocurren unas preguntas:

¿Ha sido un acierto calificar a China como enemigo equiparándola con Rusia?

¿Cómo se posicionará en este conflicto Corea del Norte?

¿Es correcta la postura de EEUU en el conflicto o existen intereses   económicos para ejercer una especie de ‘protectorado’ sobre Europa a cambio de suculentos beneficios?

¿Porqué no se ha hablado claramente, en el seno de la OTAN, de su postura en el caso de un hipotético ataque a Ceuta y Melilla por parte de Marruecos?

Lo cierto es que el panorama estratégico internacional vuelve a resultar ‘inquietante’ recordando a la ‘guerra fría’ y sus consecuencias a corto o medio plazo, salvando las diferencias, pueden ser imprevisibles.

¡Paz en Ucrania!

José Manuel García Albarrán

Médico jubilado

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